Pável Pardo negó que tras la derrota frente a Chivas el técnico del América, Jesús Ramírez, haya recibido un ultimátum del presidente del club, Michel Bauer, en el sentido de que o ganan el sábado ante Jaguares o se va.

El pasado lunes el dirigente dijo que todos en general estamos en espera de buenos resultados y si el objetivo no se consigue tomará cartas en el asunto. La directiva decidirá lo mejor, aclaró ayer en rueda de prensa realizada en Coapa.

En ningún momento mencionó el nombre de Jesús; la advertencia fue para todo el plantel, recalcó Pardo, quien consideró que el regaño y la exigencia de Bauer es normal: inclusive, creo que yo en su lugar habría hecho algo más drástico, porque somos profesionales y debemos responder a la expectativa, saber que esto es un juego con la obligación de ganar.

El ex mediocampista del Stuttgart de Alemania reconoció que el cielo luce negro para las Águilas: Se complica la situación y hay que pensar en vencer este sábado, es lo único que queda. En Chiapas es ganar sí o sí; se acabó el margen de error.

Reconoció que están quedando en deuda con la afición y directiva, porque el equipo debe estar en los primeros lugares, e identificó la inconsistencia y falta de tino como el principal problema.

Hemos sido irregulares en el torneo, pero creo que se ha jugado bien, sólo falta concretar. En el análisis, el América genera más situaciones de gol que los rivales, no juega mal. Sin embargo, esto se gana con goles, precisó.

Pável Pardo admitió que han quedado en deuda con la aficiónFoto Reuters

–¿Motiva o preocupa un diálogo así con la directiva?

–Por la experiencia y madurez que tengo lo tomo como parte de la vida. Si no tienes buenos resultados pasas a un lado, aquí nos contrataron para entregarlos. En el grupo hemos platicado que no hay más oportunidades, el tiempo se agota y necesitamos hacer un juego perfecto.

Añadió que la decisión de quedarse o salir del plantel debemos dejarla al final. En tanto, deben agotarse todas las posibilidades. Hemos perdido una (contra Chivas), pero quedan cuatro finales.

No obstante, aceptó que el ánimo está un poco golpeado: “Después de perder un clásico es difícil asimilar, pero no hay pretexto y debemos dar la cara sin caer en la desesperación.

¡Claro que nos duele!, el equipo estuvo triste hasta ayer, pero hoy cambia la situación, la mente está puesta en la próxima cita contra Jaguares.

Pável rehusó responsabilizar a los novatos Daniel Márquez y Tony López, quienes desperdiciaron oportunidades de gol en el clásico. Somos un equipo y todos nos equivocamos. En todo caso, la mayor responsabilidad debe recaer en la gente de experiencia. Ellos han hecho ocho goles entre los dos, lo cual no está mal.