Usted está aquí: jueves 5 de febrero de 2009 Espectáculos

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El luchador y los niños, en Guatemala

A 25 años de la desaparición de El Santo, El Enmascado de Plata

Juan Manuel Vázquez

Unas horas antes de que el comandante Ernesto Che Guevara entrara a La Habana tras la huida del dictador Fulgencio Batista, el primero de enero de 1959, en las calles de esa ciudad, Santo, El Enmascarado de Plata cayó en las garras de un grupo de maleantes, donde un científico demente lo obliga a robar una fórmula para la desintegración molecular, lo que desencadena una batalla campal para evitar que el letal invento terminara en poder de una potencia extranjera.

 

El mexicano se muestra en el modo de ocultarse; nos revelamos en las máscaras que elegimos: Armando Bartra

Juan Manuel Vázquez

El Santo es la máscara por excelencia. No es sólo un luchador enmascarado, sino un símbolo representado en una máscara; esta condición es la que le da profundidad mitológica al personaje, sostiene el sociólogo Armando Bartra, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana y especialista en historieta popular mexicana.

 

Listos, los festejos conmemorativos

 
El Santo en una función en la Arena San Juan Pantitlán, en 1968, en el estado de México

La máscara fue un verdadero problema; tuve que enfrentarme a mis seguidores: El Santo

Pedro Aldana Aranda

“Jamás pensé que El Santo fuera a durar tanto tiempo”, confesó Rodolfo Guzmán Huerta, mientras dejaba caer, pesadamente, su cuerpo, aún musculoso, en el sillón…

 

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