Martha González E. *

Sumar apoyos a huicholes para su desarrollo educativo

Las organizaciones civiles se unen para intentar hacer menos difícil la situación de los pueblos indígenas jaliscienses. Destaca la convocatoria suscrita por tres grupos de teatro de títeres, que dice: "(...) los niños wixarikas o huicholes que cursan educación primaria en los albergues de la sierra enfrentan gélidas temperaturas, con sus tradicionales ropas de manta, acurrucados en pequeños grupos de niños y niñas de seis a 12 años, buscando la protección del calor de los otros cuerpos de compañeros y hermanos (...) tos constante en sus temblorosos cuerpos (...) no hay medicinas, los estantes están vacíos (...) ahí todos tienen una deficiente alimentación".

El mensaje finaliza con la convocatoria a la solidaridad con Pueblo Nuevo, Mezquitic, Jalisco, donando chamarras, cobijas, suéteres y medicamentos, como antibióticos y jarabes para la tos.

"Es una buena campaña para que la gente ayude, pero la preocupación debiera ser del mismo gobierno estatal para que destinara más medicamentos a la región. De nada sirven la ropa y las cobijas si no hay medicamentos. Esta escasez la sufren, según sabemos, unas 20 comunidades", afirma Samuel Salvador Ortiz, nacido hace 32 años en San Andrés Comihata, municipio de Mezquitic, quien cursa el penúltimo semestre de la carrera de abogado y trabaja en la defensoría de los habitantes de las comunidades wixarikas.

Alejandro Morales Rodríguez, director de la región norte de la Secretaría de Salubridad estatal, con sede en Colotlán, informó que el cuadro básico consta de 63 medicamentos para las enfermedades más comunes, y se resurte cada dos meses, pero si se informa cuál medicamento se agotó, éste se repone pronto. El problema, dijo, es que no informan acerca de las medicinas que están faltando.

Las 14 comunidades en las que Salubridad divide los poblados de la etnia huichola se localizan principalmente en dos municipios: Mezquitic y Bolaños, en los que hay tres grandes comunidades: Santa Catarina, San Andrés y San Sebastián, con su anexo Tuxpan de Bolaños, todos ubicados en la zona norte jalisciense. Para llegar a alguno de estos pueblos hay que caminar de seis a ocho horas.

La Secretaría de Salud de Jalisco tiene un presupuesto para este año de 3 mil millones 348 mil 29 pesos, de ese monto, 149 millones (menos de uno por ciento) se destinan al desarrollo socioeconómico de personas en condiciones de pobreza y vulnerabilidad.

En materia de educación, la situación no es mejor para los huicholes. Las estadísticas nacionales sitúan a la educación de las etnias en Jalisco en el último lugar de aprovechamiento escolar. Tienen el último lugar en lectura y el penúltimo en matemáticas, respecto a la media nacional de las etnias de otros estados.

La Secretaría de Educación Publica estatal cuenta con una Dirección de Educación Indígena, que cubre el territorio norte con los wixarika y el sur con los nahuas, y lo hace con un presupuesto anual cercano a los 9 millones de pesos, para sueldos de unos 318 docentes y 10 directivos, lo que resulta ser 0.5 por ciento del presupuesto total del ramo, que asciende a 16 mil millones 718 mil 188 pesos. Hay alrededor de 5 mil niños indígenas en edad escolar en la entidad.

En Jalisco, según los indicadores educativos, la deserción estatal en educación indígena es de 5.5 por ciento, mientras que la estatal nacional es de 1.3 por ciento.

En la enseñanza primaria, prescolar e inicial intercultural bilingüe, para niños y niñas indígenas, wixarikas y nahuas, en 2003 disminuyó el índice de reprobados a 6.9; el ausentismo escolar se estableció en 3.2, y la eficiencia terminal ascendió a 66.6.

Los maestros de origen wiaxarikas proponen un modelo educativo que atienda a la diversidad cultural y lingüística, y que favorezca la identidad local, regional y nacional, así como las prácticas que procuran libertad y justicia para todos.

Y una oportunidad para llevar adelante la propuesta se presentará pronto. La Dirección de Educación Indígena de la Secretaría de Educación Pública de Jalisco convocó a una reunión, en la que participarán el consejo de ancianos y las autoridades de los indígenas, conocedoras y depositarias de los conocimientos y tradiciones wixarikas o huicholas, para recopilar los conocimientos que deberá contener el proyecto del contenido de los libros de texto correspondientes a las comunidades indígenas jaliscienses. El encuentro será el 6 y 7 de noviembre en una de las comunidades de Mezquitic.

* Periodista de Jalisco