El Programa Espacial Universitario (PEU), de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), anunció el comienzo de la Misión Ixaya, consistente en la construcción y eventual puesta en órbita de un nanosatélite de manufactura completamente nacional, en específico universitaria, dedicada, en principio, a la prevención y gestión de incendios forestales en el país.

El acto tuvo lugar en el Pabellón Nacional de la Biodiversidad, ubicado en el Centro Cultural Universitario, y sirvió asimismo para hacer el lanzamiento de una campaña de recaudación pública de fondos a fin de financiar ese proyecto espacial, cuyo costo, se informó, es de 13 millones de pesos, alrededor de 775 mil dólares.

El coordinador del PEU, el físico José Francisco Valdés Galicia, destacó que esta iniciativa universitaria representa no sólo el desarrollo de tecnología espacial mexicana propia, sino el potencial ahorro para el país de al menos 2 mil millones de dólares al año, que es lo que aseguró se paga a instancias extranjeras por la compra de servicios satelitales, en particular de imágenes.

Explicó que esta misión –cuyo nombre, Ixaya, es un vocablo en lengua náhuatl que significa “abre los ojos”– consiste en el desarrollo de un nanosatélite de tipo CubeSat de tres unidades o módulos, con una dimensión total de 30 centímetros y un peso de tres kilogramos, que una vez puesto en órbita permitirá obtener imágenes que podrían utilizarse en acciones y políticas públicas en materia de protección civil, ambiental y urbana.

Aclaró que “hay imágenes satelitales de muchas cosas y problemas de muchos tipos”, desde los meteorológicos hasta los incendios forestales, siendo estos últimos en el que la misión decidió centrarse tras encontrar que tan sólo en el transcurso de 2023 se han producido 6 mil 675 de esos eventos en las 32 entidades del país, los cuales han arrasado con 815 mil 746 hectáreas de bosques.

“Tenemos sistemas actuales que monitorean incendios, pero ninguno que dé una resolución y respuesta suficientemente buena de la situación, que pueda pescar los incendios cuando están empezando; no tenemos la tecnología satelital, gastamos más de 2 mil millones de dólares al año en la compra de servicios satelitales en este país”, indicó el investigador.

“Si tomamos estas imágenes desde el espacio, nos dan otra perspectiva; podríamos avisar a tiempo a las autoridades, y eso da la posibilidad de crear sistemas de alerta temprana. Aquí hay datos de relevancia en donde México pudiera ser generador y propietario de los mismos. Estamos gestando una nueva tecnología que tendría consecuencias para el sector espacial de nuestro país.”

Valdés Galicia aclaró que éste “no es un proyecto último”, sino que con él se busca demostrar la viabilidad de esta tecnología y la capacidad para generar nanosatélites propios de percepción remota, a partir de lo cual se establecería un desarrollo tecnológico en el área satelital con base en las necesidades específicas del país.

Subrayó que si bien los beneficios extras de esta iniciativa son muchos, decidieron escoger dos: “el monitoreo de la presencia o ausencia de vegetación, si está creciendo o decreciendo, y también el crecimiento de las ciudades, ya que tenemos en México muchas que lo hacen muy irregularmente. Esto sería un poco más a largo plazo”.

El investigador resaltó que una de las innovaciones tecnológicas de la Misión Ixaya será la incorporación de cámaras especiales –capaces de obtener imágenes en las bandas rojo, verde y azul, y el infrarrojo– que no han sido antes utilizadas en satélites de órbita baja o CubeSat; el de la UNAM, detalló, será colocado a una altitud de entre 500 y 600 kilómetros.

En este proyecto participan varias instancias de la universidad nacional, como los Institutos de Geofísica, Astronomía y Geografía, así como los laboratorios nacionales de Observación de la Tierra y de Ingeniería Espacial y Automotriz, entre otras.

Para su desarrollo se consultó a diversas instituciones públicas nacionales, como los institutos de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático, el Inegi, el Cenapred y las secretarías del Medio Ambiente y de Educación, Ciencia y Tecnología de la Ciudad de México.

“Las imágenes (satelitales) son una de las fuentes principales de la salida de divisas del país y de utilizar una tecnología que aún no está desarrollada”, agregó el especialista, quien especificó que éste es un proyecto a 36 meses y que su diseño conceptual no sólo está terminado, sino que fue revisado por expertos internacionales que dieron su visto bueno.

Luego de recalcar los beneficios y la utilidad de esta misión, el director del PEU invitó a la sociedad, las instituciones y las empresas del país a sumarse a “esta aventura del conocimiento y de la tecnología”, para la cual se arrancó una campaña de recaudación de fondos. Las aportaciones pueden hacerse mediante donativos directos y también la compra de una serie de artículos promocionales en la página Tienda UNAM. Más información a través del correo [email protected].