General Motors ofreció a los trabajadores en Estados Unidos un aumento salarial de 10 por ciento y dos pagos adicionales de suma única de 3 por ciento durante cuatro años en una contrapropuesta al sindicato United Auto Workers (UAW) antes de la expiración del contrato el 14 de septiembre. Es “una propuesta insultante que no se acerca a un acuerdo equitativo para los trabajadores del automóvil”, respondió el presidente del sindicato, Shawn Fain. La semana pasada, Ford dijo que había propuesto un aumento de 9 por ciento, mucho menos que el alza de 46 por ciento solicitada por el sindicato. Stellantis, matriz de Chrysler, también tiene previsto presentar una contraoferta a la UAW esta semana.