Ciudad Juárez, Chih., Luego de una reunión de los tres niveles de gobierno en esta ciudad, la mandataria de Chihuahua, la panista María Eugenia Campos Galván, pidió a la Federación detener el flujo migratorio a Juárez para evitar otra tragedia como la muerte de 40 indocumentados en un incendio ocurrido el 27 de marzo.
Al participar en la mesa de seguridad, Campos Galván afirmó que este tema “se ha tornado en una grave crisis; además de que puede ocurrir otra tragedia o un estallido social. Le pido al gobierno federal detenga el flujo migratorio ya”.
Señaló que hace meses “pedimos, a través de la Secretaría de Gobernación, que controlara el flujo migratorio, que se controlara desde la frontera sur de nuestro país y que se expusiera puntualmente la política migratoria con la cual coordinamos nuestra actuación, (pero) es hora que no lo hace.
“Y mientras las autoridades del país exhiben esta pasividad e insensibilidad que tiene pasmados particularmente a los juarenses, siguen llegando más migrantes a diario”, destacó.
La mandataria expuso que las organizaciones civiles y religiosas han atendido y acompañado a los indocumentados; además, “calculan que hay unos 35 mil varados en Ciudad Juárez esperando poder cruzar hacia Estados Unidos”
El director de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, Gilberto Loya, precisó que hay alrededor de 30 mil extranjeros en Juárez “y cada día llegan más”.
Campos Galván comparó esa cifra: “Hoy tenemos un municipio del tamaño de Saucillo o de Buenaventura en Ciudad Juárez”.
El delegado del gobierno de México en la entidad, Juan Carlos Loera de la Rosa, acusó a la mandataria estatal de mentir al decir que la Federación no tiene una política migratoria.