Al menos 75 personas, entre ellos una cincuentena de escolares, se intoxicaron debido a los altos niveles de contaminación provocados por la industria pesada en las localidades chilenas de Quintero y Puchuncaví (en la imagen), consideradas “zonas de sacrificio ambiental”, informaron ayer autoridades. Ambas localidades albergan empresas mineras, petroleras, cementeras, gasíferas y químicas. El lunes “tuvimos un pico de dióxido de azufre que superó cinco veces la norma. Ambos municipios han tolerado esta situación por décadas”, denunció Rubén Gutiérrez, alcalde de Quintero. La delegada presidencial de Valparaíso, Sofía González, decretó la emergencia ambiental en el área, donde se suspendieron las clases, se prohibió toda actividad física y las fuentes de calefacción, en un otoño austral de bajísimas temperaturas. Foto Afp