Las sanciones que la Liga Mx y la Federación Mexicana de Futbol (FMF) impusieron al club Querétaro por los actos de violencia ocurridos el pasado sábado en el estadio La Corregidora, durante el partido entre Gallos Blancos y Atlas, “sólo fueron paliativos, pues el verdadero daño, que son las barras y quienes las permiten, no fue resuelto como se debe”, consideró el ex directivo Mario Trejo.
Mencionó que más allá de los castigos administrativos, “se debe investigar a fondo qué motivó a estos inadaptados a actuar de esa forma tan brutal, pues no creo que el marcador o un insulto entre los integrantes de estos mal llamados grupos de animación haya desatado tanta violencia”.
“Este era un momento puntual para poder erradicar a las barras, que no tienen nada que ver con el deporte, pues es un grupo de delincuentes que se cuelga del futbol y de los equipos para su beneficio económico y hacer una serie de barbaridades”.
Asimismo, el otrora dirigente de equipos como Pumas y el extinto Veracruz confió en que tanto la Liga Mx como la FMF “ya estén enfocados en cómo erradicar realmente a las barras y a los directivos que las respaldan. Mientras sigan existiendo estos grupos, continuarán estos actos violentos. El problema se debe atacar desde la raíz”.
Por otro lado, los clubes América y Chivas exhortaron a sus aficionados a vivir un “Clásico sin colores”, iniciativa para que los asistentes a los partidos de este sábado en el estadio Akron, y el domingo en el Azteca, en la rama femenil, acudan vestidos de blanco como una forma significativa de “expulsar al miedo y la violencia de nuestras canchas”.
En tanto, una fuerza policial con mil 400 uniformados para el partido Chivas-América y con mil 800 para la siguiente semana en el duelo Atlas-Chivas, conforman el plan conjunto que los ayuntamientos de Guadalajara y Zapopan anunciaron será implementado para garantizar la seguridad en ambos encuentros.
En Nuevo León, la seguridad afuera de los estadios de Rayados y Tigres será ahora responsabilidad municipal y estatal, sin contrataciones de empresas privadas, confirmó ayer el gobernador Samuel García.
Mientras al interior de los recintos será mixta, con empresas privadas y elementos municipales y estatales.
Por otra parte, en Guadalajara rugió el grito “¿en dónde están, en dónde están, los policías que nos iban a cuidar?”, la consigna más repetida a lo largo de los nueve kilómetros que separan la glorieta de la Minerva del estadio Jalisco, durante la marcha que aficionados, la mayoría atlistas, realizaron la tarde-noche de ayer para repudiar los actos de violencia del sábado pasado en el estadio La Corregidora, en Querétaro, y pedir un castigo ejemplar contra los responsables.
La caminata fue absolutamente pacífica y aunque prevalecieron las camisetas y banderas rojinegras en la mayoría de los asistentes, también se vieron otras con el escudo de Chivas, América, León, Pachuca, además de una gran cantidad de familias con sus hijos menores de edad a quienes llevaron de la mano o en carriolas en una manifestación en la que muchos asistentes pidieron garantizar la seguridad en los estadios para poder acudir sin miedo.
