Caracas. El equipo de colaboradores del líder opositor venezolano Juan Guaidó sufrió ayer una fisura cuando Julio Borges, quien era su canciller, anunció su retiro y dijo que el autodenominado “gobierno interino” debía “desaparecer”, dos semanas después de una aplastante derrota opositora en los comicios regionales.

Guaidó se proclamó a principios de 2019 “presidente interino” y ha sido reconocido por Estados Unidos y sus aliados como el líder legítimo de Venezuela por considerar que la relección del mandatario venezolano, Nicolás Maduro, en 2018, fue un fraude, sin haber podido desplazar hasta ahora al gobierno constitucional venezolano.

El retiro de Borges del equipo de Guaidó, deja a la oposición más debilitada.

“A nuestro modo de ver, el gobierno interino se ha deformado”, sostuvo Borges en videoconferencia de prensa. “En lugar de ser un instrumento para luchar contra la dictadura, el gobierno interino se ha convertido en una especie de casta”, agregó.

Borges asumió el cargo de “canciller” desde Bogotá, donde el gobierno le concedió en 2018 el asilo político tras ser señalado por el gobierno de Maduro de ser parte de un presunto atentando en su contra.

Borges es miembro del partido Primero Justicia, uno de los cuatro grandes grupos congregados en la oposición, y parte de la coalición que ha apoyado a Guaidó.

“La noción del gobierno interino tiene que desaparecer, no podemos seguir con una nómina, con una burocracia que el año pasado llegó a unas mil 600 personas”, añadió.

El opositor expondrá mañana sus propuestas ante una comisión conformada por miembros del Parlamento electo en 2015, cuya vigencia caducó en enero de 2021, tras asumir funciones la nueva Asamblea Nacional, de mayoría oficialista.

“Hemos perdido legitimidad y apoyo internacional, porque ha habido demasiadas contradicciones, demasiados errores y escándalos, y eso ha hecho que el mundo haya puesto el caso venezolano en el refrigerador”, remarcó.

Es apremiante “reconstruir y acumular la fuerza para volver a ganar legitimidad dentro y fuera de Venezuela”, aseveró.

La propuesta de Borges busca un cambio de ruta en la oposición, pulverizada por profundas fracturas que fueron evidentes en las elecciones regionales del 21 de noviembre celebradas con el retorno de los principales partidos opositores tras varios años de boicot, pero con pocos acuerdos en candidaturas unitarias.

Borges criticó, además, los hechos de corrupción que han salpicado al gobierno interino. Subrayó que el interinato debía funcionar sólo para ocuparse de los activos de Venezuela en el exterior, como el refinador Citgo en Estados Unidos, que son manejados por juntas nombradas por la oposición, pero que la parte política debía restructurarse.

“El tema de los activos (fuera de Venezuela) verdaderamente es un escándalo, no hay voluntad política de los partidos para hacer lo que es necesario: crear un fideicomiso para que esos activos se separen del manejo de las formaciones políticas, sobre todo la de Guaidó, y se pueda tener independencia y transparencia”, indicó.

El partido Primero Justicia, al cual pertenece Borges, no respondió de inmediato a un pedido de comentarios, tampoco la oficina de Guaidó.

Las divisiones internas de la oposición y sus tardíos acuerdos para alianzas son vistas por analistas y algunos dirigentes opositores como causas de su descalabro electoral el pasado 21 de noviembre, cuando de 23 gubernaturas en disputa consiguieron el triunfo en tres, una menos que en las elecciones de 2017.

En tanto, Maduro anunció que su coalición de partidos oficialistas designó al actual ministro de Industrias, Jorge Arreaza, candidato al gobierno del estado de Barinas, cuna del fallecido Hugo Chávez.

La elección en ese estado, bastión del oficialismo, estaba disputada por una estrecha diferencia hasta que en noviembre, el Tribunal Supremo de Justicia –visto por los opositores como brazo del gobierno–, anunció que el candidato opositor en Barinas, Freddy Superlano, estaba inhabilitado para ocupar cargos públicos por investigaciones administrativas previas y ordenó repetir la elección el 9 de enero.

La oposición anunció antier que la esposa de Superlano, Aurora Silva, será su candidata.