Acapulco, Gro. Habitantes del fraccionamiento Pedregal de Cantaluna, en el puerto de Acapulco hicieron un llamado a los tres niveles de gobierno, a intervenir para la reparación o reconstrucción de sus viviendas, dañadas por el sismo del pasado siete de septiembre, con magnitud 7.1 y a obligar a la constructora, Casas Paquimé, a hacerse responsable.
En conferencia de prensa en un área común del conjunto de viviendas, la mañana de este domingo, unos 150 habitantes de Pedregal de Cantaluna, que se ubica al poniente de Acapulco, reafirmaron que el dictamen emitido hace unos días por protección civil estatal, señala que ninguno de los 177 edificios revisados deben ser habitados ante el riesgo de nuevos sismos, lo cual afecta a más de 600 familias.
Los afectados exigieron la intervención del presidente Andrés Manuel López Obrador, para que Infonavit y Fovissste aporten los recursos para la reconstrucción o reparación de los inmuebles o que se obligue a la empresa aseguradora a aportar el costo de la reparación.
Advirtieron que la aseguradora solo les ofrece 10 mil pesos pagar dos meses de renta, y entre 30 y 70 mil pesos para hacer reparaciones superficiales a los departamentos, pero no estructurales.
El precio de estas casas oscila entre los 300 mil y un millón de pesos y los vecinos señalaron que 80 por ciento de habitantes han abandonado del complejo, mientras que otros han instalado carpas para pasar la noche, ante el temor de vivir en sus casas.
Acusaron que a algunos trabajadores se les continúan descontando las mensualidades del Infonavit por casas que no pueden habitar, otros pagaron las viviendas de contado.