Especialistas señalaron que las discrepancias entre la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y el presidente Andrés Manuel López Obrador “no significan una ruptura, porque es evidente que el magisterio aún tiene expectativas de que se podrá establecer un diálogo político, más que educativo” con el mandatario federal.
Mauro Jarquín Ramírez, politólogo y experto en educación, destacó que “sí es un grave error comparar a la CNTE con una organización extremista y ligada a los intereses oligárquicos”.
Asumir este discurso “es desconocer la historia de la lucha magisterial, que siempre ha estado ligada a los movimientos sociales, lo que ha mantenido vigente a la CNTE”.
Recordó que la protesta del pasado viernes en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, en la que se retuvo al mandatario federal por más de dos horas y le impidió encabezar su conferencia matutina, se da luego de 18 mesas de negociación en las que se obtuvieron “pocos acuerdos sustantivos”, pese a las promesas de campaña del entonces candidato López Obrador, de que se daría una verdadera abrogación de la reforma peñista, lo que hasta la fecha, subrayó, no ha ocurrido.
Jarquín Ramírez indicó que ninguna organización de izquierda es “monolítica, y la CNTE no lo es. Tiene sus corrientes, cada sección sindical pueden tener un posicionamiento, incluso con sus contradicciones”.
Por ello, estimó que la campaña de desprestigio y linchamiento contra los maestros disidentes, “desde algunos sectores de la intelectualidad que se considera de izquierda, es resultado de una visión limitada, al considerar una muestra de inconformidad como una traición”.
Al respecto, integrantes del movimiento magisterial y popular de La Laguna, que agrupa a los maestros de la CNTE en la región Coahuila-Durango, manifestaron su apoyo a los docentes de Chiapas, y apreciaron que vincular la lucha magisterial a movimientos de ultraderecha “es un ataque directo y una denostación” a los educadores del país.
Adelantaron que de no concretarse un diálogo con la Comisión Nacional Única de Negociación de la CNTE con el presidente López Obrador, “nos reservamos el derecho de movilizarnos, ratificando nuestro compromiso de lucha permanente por la transformación del país, de la educación y de nuestro sindicato”.
