Mérida, Yuc., Madres de familia y sus hijos, originarios del municipio maya de Homún, acudieron hoy a los juzgados federales para entregar cartas y dibujos en los cuales los pequeños solicitan no aprobar una empresa porcícola a la que acusan de contaminar el manto freático de la región.
Seis mujeres y sus hijos mostraron pancartas en las que advierten que las aguas negras del criadero contaminan los cenotes.
La querella sobre este caso, que se dirime en el juzgado segundo de distrito, a cargo del juez Rogelio Leal Mota, decidiría este jueves si mantiene o revoca una suspensión otorgada por un juez contra las operaciones de la empresa Producción Alimentaria Porcícola (Papo), de Grupo Porcícola Mexicano, que instaló una granja de producción intensiva de cerdos (unas 49 mil crías mensualmente).
La media docena de personas que se apostó fuera de los juzgados mostró copia de un comunicado que se entregó a Leal Mota para pedirle que niegue permiso a Papo.
“Como tutoras de los chichan kanan ts’ono’oto’ob (vigilantes en lengua maya), de los pequeños guardianes de los cenotes, estamos acompañándolos para hacer entrega de estas palabras para el juez.
“También queremos decirles que el pueblo maya de Homún sigue unido y fuerte. Estaremos atentos a la resolución de mañana.”
La disputa se inició en 2016 con la instalación de la granja, que está cerrada desde octubre de 2018 debido a la suspensión otorgada por un juez a partir del amparo promovido por los padres de seis niños, asesorados por Equipo Indignación.
