Que esté aprobada la despenalización del aborto en tres estados, Ciudad de México, Oaxaca y ahora Hidalgo, es un logro. No obstante, existen situaciones permitidas para acceder a la interrupción del embarazo en todo el territorio mexicano; es decir, en cada una de las entidades es legal abortar según ciertas causales, señaló María Antonieta Alcalde Castro, directora de Ipas CAM (Centroamérica y México).

Añadió que, no obstante, “seguiremos teniendo las conversaciones necesarias hasta que quede claro que el aborto es un tema de salud pública, de derechos humanos y de justicia social. Seguiremos trabajando hasta que el aborto seguro sea reconocido y garantizado como un derecho” en el país.

Son ocho las situaciones o causales por las que se permite el aborto por ley. Entre ellas cuando el embarazo es producto de violencia sexual. “Aplica cuando el embarazo es resultado de relaciones sexuales forzadas, coaccionadas o no consentidas y se permite en todas las entidades”. También cuando el término del embarazo es imprudencial o culposo, es decir, “el aborto es consecuencia de un acto no premeditado y está considerado en todos los estados, excepto Nuevo León y Tabasco, y cuando la vida de la mujer corre peligro si continúa la gestación”.

Asimismo por malformaciones graves del producto y cuando la salud (física, sicológica o social) de la mujer está en riesgo o se ve afectada por el embarazo, por razones económicas graves. Cuando la mujer tenga una situación económica precaria y cuando hay una inseminación artificial no consentida. Cuando fue por un método de reproducción asistida que fue realizado contra la voluntad de la mujer.

La última es aquella a petición de la mujer y sólo ocurre en las tres entidades mencionadas.

Alcalde Castro precisó que las causales en cada entidad no sólo establecen el acceso a la interrupción del embarazo para las mujeres que radican en ese estado, sino que también incluye a las mujeres que viven en otras entidades y se encuentran o se trasladen al territorio.