Ciudad de México. Para tener éxito en la campaña de vacunación contra Covid-19 a nivel mundial, los países importantes en las relaciones internacionales por sus capacidades biomédicas, tendrían que aportar y coadyuvar en esta materia, sin embargo, hoy “el mundo está fragmentado, sin liderazgo” frente a esta emergencia sanitaria, señaló María Cristina Rosas González, académica investigadora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En el conversatorio digital La geopolítica de las vacunas en la lucha contra Covid-19. Implicaciones políticas, sociales y éticas, expuso que Estados Unidos, bajo el gobierno del ex presidente Donald Trump, se encargó de “marcar culpas”, entre otros a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y China, y la Unión Europea “fragmentada y debilitada previamente por el Brexit fue incapaz de generar una respuesta concertada contra Covid-19”.
En contraste, añadió, China, Rusia y Cuba, que enfrentan sanciones de distinto tipo y por diversas razones por parte de la comunidad internacional, “han desplegado una diplomacia en salud global ante la pandemia” aspirando a revertirlas y a ubicarse como líderes en gobernanza global.
Sobre México, Rosas González expuso que el país llegó a ser potencia mundial en la producción de vacunas, pero por la falta de apoyos y de visión e interés de la clase política así como presiones del sector farmacéutico esto se perdió. Actualmente “depende por entero de la importación de biológicos”, mencionó.
En este sentido, destacó la necesidad de “seguir pugnando por una mayor cooperación internacional para luchar contra la pandemia”.
Por su parte, Guillermina Baena Paz, también de la FCPyS de la UNAM, expuso que la polarización que se viven entre las potencias mundiales “no va a disminuir mientras no sigamos luchando porque la vacunación sea un bien público global y que alcance a todos los que se quieren vacunar”.