Después de ocho meses de medidas contra la pandemia, 47 por ciento de los centros nocturnos, discotecas y bares en todo el país han cerrado definitivamente sus puertas, por lo que al menos se han perdido 295 mil empleos, aseguraron representantes de ese sector.

En conferencia, el presidente de la Asociación Mexicana de Bares, Discotecas y Centros Nocturnos (Ambadic), Helking Aguilar Cárdenas, dijo que la situación para esa industria es “catastrófica”, pues gobiernos de distintos estados y de la Ciudad de México han impuesto restricciones y cierres a ese tipo de establecimientos, por lo que consideró que los han “satanizado”.

Comentó que de continuar esta situación en el país, el sector, que genera 5.3 por ciento del producto interno bruto del país, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), puede cerrar el año con una pérdida de alrededor de 350 mil empleos.

Aguilar Cárdenas detalló que los trabajadores de ese tipo de establecimientos dejaron de percibir cerca de 4 mil 480 millones de pesos mensuales por concepto de propinas, que representan alrededor de 8 mil pesos para cada uno.

El directivo destacó que no se trata de “abrir por abrir”, sino de hacerlo con condiciones de seguridad, pues en estos ocho meses la derrama económica perdida por el cierre del sector asciende a 160 mil millones de pesos, es decir, 20 mil millones de pesos mensuales.

Explicó que actualmente, ante las restricciones de horarios de funcionamiento y servicio, la industria apenas logra sostener 265 mil empleos a escala nacional en los que el trabajador percibe, en promedio, dos terceras partes menos del ingreso que obtenía antes de la pandemia y 3 mil 760 negocios han cerrado de forma permanente.

Amagan con protestas

El directivo pidió una reunión urgente con la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, así como con las autoridades de Querétaro, Puebla, Cancún, Playa del Carmen, Puerto Vallarta, Zapopan, Monterrey, Veracruz y Jalisco para aplicar un programa gradual de reapertura con protocolos sanitarios, pues “el sector no tolerará que se le satanice más”.

Advirtió que si no hay respuesta de los gobiernos en la primera semana de enero se convocará a movilizaciones de la industria en todo el país.

Estimó que tan sólo en la capital del país pueden quedar sin empleo alrededor de 25 mil personas, entre bar tenders, meseros, diyéis y otros, pues la industria se encuentra en crisis.

El presidente de la organización acotó que si hasta el momento no se han hecho movilizaciones, es porque buscan el camino del diálogo y no exponer a los trabajadores, pese a que ellos han planteado su deseo de salir a las calles a expresar su descontento.

Abundó que los establecimientos estén dispuestos a invertir y crear espacios “libres de Covid-19”, proyecto del cual ya tiene conocimiento la Secretaría de Gobierno de la CDMX.

La Ambadic también manifestó que la reducción de horario de venta de bebidas alcohólicas y la ley seca han demostrado no tener efectos significativos en la disminución de movilidad o contagios de Covid-19 y en cambio hacen surgir lugares clandestinos que no pueden ser vigilados por las autoridades.