Viernes 8 de agosto de 2025, p. 22
Washington. El presidente Donald Trump ordenó ayer al Departamento de Comercio que realice un nuevo censo poblacional que excluya a los migrantes indocumentados del recuento, lo que es inconstitucional. De concretarse, incidirá en los mapas electorales. Además, firmó una orden ejecutiva que obliga a las universidades a revelar los datos en sus procesos de admisión sobre “la raza” de los estudiantes.
“Solicité que se comience a trabajar de inmediato en un nuevo censo [poblacional] sumamente preciso que se base en hechos y cifras actuales y, lo que es más importante, que se usan los resultados y la información que se obtuvo de las elecciones presidenciales de 2024”, escribió el magnate en Truth Social.
Añadió, en mayúsculas, que “las personas que están en nuestro país ilegalmente no serán contabilizadas en el censo”, pese a que la directriz viola la enmienda 14 de la Constitución que exige contabilizar a todos los residentes, independientemente de su estatus de ciudadanía o raza.
El presidente firmó una orden ejecutiva para obligar a las universidades que reciban fondos federales a facilitar todos los datos de admisión para detectar posibles casos de “discriminación positiva por raza”, una práctica que el Tribunal Supremo dictaminó como ilegal en una histórica sentencia en 2023.
Trump argumentó que, pese al decreto de la instancia judicial, la falta de datos plantea dudas sobre la erradicación de dicha práctica, por lo que consideró “esencial” que exista una “mayor transparencia” y se expongan “prácticas ilegales” susceptibles de derivar en “jerarquías raciales”, aunque no añadió detalles sobre las consecuencias que enfrentarán los institutos educativos si no cooperan.
Mientras, la portavoz de la Casa Blanca, Taylor Rogers, declaró a Fox News que “en tan sólo 200 días Trump ha convertido a Estados Unidos en el país más cálido del mundo”, y destacó “los logros” en materia de economía, comercio, educación, política exterior e inmigración, mientras la jueza federal de Miami, Kathleen Williams, ordenó suspender temporalmente la construcción dela prisión de migrantes Alcatraz de los caimanes, tras una demanda de grupos ecologistas.
Las ONG denunciantes argumentaron que las instalaciones ponen en riesgo el delicado ecosistema de los Everglades, y afirmaron que se construyeron apresuradamente sin los estudios de impacto ambiental necesarios. El centro de detención, ubicado en un aeródromo abandonado en el humedal de los Everglades, seguirá albergando a inmigrantes detenidos, pero no podrá hacer más obras mientras se tramita la demanda.
Pese a la oposición que ha enfrentado Trump en tribunales, el magnate continúa con su agresiva ofensiva migratoria, incluyendo desde el Tío Sam hasta Supermán en una campaña publicitaria con “íconos patrióticos” para reclutar agentes y realizar mayores redadas.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, se comprometió a contratar a otros 10 mil agentes, en un proceso que aumentaría las filas del ICE en 50 por ciento. Para conseguirlo, la funcionaria solicitó a la Suprema Corte que elimine los límites de edad que impedían a los mayores de 40 años convertirse en agentes y detener a personas “sin sospecha razonable”.
A su vez, el Pentágono anunció que abrirá un centro de detención de migrantes con capacidad para 5 mil personas en la base militar de Fort Bliss, Texas, cerca de México.