Washington. Los gobiernos de 12 países, cuyos ciudadanos tendrán prohibido visitar Estados Unidos a partir del 9 de junio, continuaban ayer sin entender el anuncio más reciente del presidente estadunidense, Donald Trump, al resucitar una política emblemática de su primer mandato, que en 2017 entró en vigor sin aviso y desató un caos en los aeropuertos de la nación norteamericana.

Debo actuar para proteger la seguridad nacional, señaló el mandatario al defender la medida de vigencia indeterminada.

Los países afectados son Afganistán, Myanmar, Chad, Congo, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Haití, Irán, Libia, Somalia, Sudán y Yemen, mientras el ingreso de viajeros originarios de Burundi, Cuba, Laos, Sierra Leona, Togo, Turkmenistán y Venezuela estará parcialmente restringido.

No permitiremos que entren personas que deseen perjudicarnos, declaró antier el republicano en un video publicado en redes sociales y vinculó el nuevo veto al ataque realizado el domingo en Colorado por un sospechoso originario de Egipto, país que no está en la lista de restricciones porque ha tomado medidas contra el terrorismo.

No podemos permitir la migración abierta desde ninguna latitud en la que no podamos verificar y evaluar de forma segura y fiable a quienes buscan entrar en Estados Unidos, declaró el gobernante, y apuntó a naciones con procedimientos de selección y verificación, según él, deficientes o que históricamente se han negado a aceptar de vuelta a sus propios ciudadanos.

Trump se basa en un informe de seguridad nacional sobre viajeros que se quedan más tiempo del autorizado en sus visas.

Tras el anuncio, Somalia se comprometió a colaborar con la administración Trump para abordar los problemas de seguridad. Venezuela advirtió que estar en Estados Unidos es un riesgo para cualquier persona, dijo el ministro del Interior, Diosdado Cabello, quien calificó a los gobernantes estadunidenses de gente mala; es el fascismo, son los supremacistas que se creen dueños del mundo y persiguen a nuestro pueblo, a nuestra gente, sin ninguna razón. Los demócratas y grupos de derechos civiles tildaron la prohibición de imprudente y racista.

El nuevo veto no incluye a Corea del Norte ni a Siria, que estaban lista del magnate en 2017, junto con Irak, Irán, Sudán, Libia, Somalia y Yemen. Aquel fue uno de los momentos más caóticos y confusos de la presidencia del magnate, cuando –de forma súbita–no se permitió a los viajeros de las naciones vetadas abordar sus vuelos hacia Estados Unidos o fueron detenidos después de aterrizar en territorio estadunidense. Entre ellos había estudiantes y profesores, empresarios, y turistas.

Repuntan los arrestos de indocumentados

En tanto, los arrestos realizados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) bajo la nueva administración superaron los 100 mil esta semana, divulgó el reporte oficial la cadena CBS News. Asimismo, la Casa Blanca solicitó al Congreso un presupuesto adicional para el ICE, que le permita contratar más agentes y ampliar la capacidad de detención para albergar a 100 mil personas, cuando en este momento son 54 mil los extranjeros retenidos en los centros de todo el país. El martes y miércoles, la agencia realizó más de 2 mil arrestos cada día, un drástico aumento respecto al promedio diario de 660 reportados durante los primeros 100 días de Trump.