México continuará participando en el Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (prueba PISA) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Sí la aceptamos y estamos abiertos a todas las evaluaciones, subrayó el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Todo lo que tenga que ver con la educación, se apoya, agregó, y con eso dio por concluida la ola de especulaciones surgidas en días recientes sobre la presunta decisión de suspender dicho examen en el país.

La prueba PISA tiene como objetivo examinar sobre tres áreas de competencia de los alumnos de 15 años de edad: matemáticas, lectura y ciencias naturales.

De acuerdo con información de la OCDE, lo que se busca es medir la capacidad de los estudiantes de entender y resolver problemas auténticos a partir de la aplicación de conocimientos adquiridos en las áreas mencionadas.

El estudio se lleva a cabo cada tres años. El último fue en 2022, por lo que corresponde aplicarlo en 2025 otra vez.

Las dudas que se difundieron sobre la supuesta salida de México de la siguiente ronda PISA se originaron a partir de una carta enviada por Andreas Schleicher, director de Educación y Competencias de la OCDE, a Silvia Valle, presidenta de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación, en la que expresa su preocupación por la supuesta información de que están suspendidos los preparativos para la realización del estudio.

En años pasados, esta tarea de colaboración con la OCDE la realizó el extinto Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación, el cual fue remplazado por Mejoredu, que entre sus facultades tiene la realización de todos los procesos de evaluación educativa. Ayer, aunque no hizo referencia directa a este organismo, López Obrador, aseguró que la prueba PISA se seguirá realizando en el país.