Jueves 4 de enero de 2024, p. 18
La Paz. Bolivia comenzó ayer una situación inédita con la cúpula del Poder Judicial paralizada debido a que los magistrados cesaron en sus cargos y el Legislativo no convocó a la elección de altos jueces por pugnas en el oficialismo. Desde hoy (ayer), los magistrados del órgano judicial ya no ejercen legalmente sus funciones; su decisión de prorrogarse vulnera la Constitución y genera una crisis institucional
, señaló el ex presidente Carlos Mesa, líder del opositor Comunidad Ciudadana (CC), en la red social X.
Hace dos semanas, los magistrados de la Corte Suprema de Justicia y del Tribunal Constitucional se prorrogaron en sus cargos hasta la designación de nuevas autoridades, decisión respaldada por autoridades del Poder Ejecutivo, pero cuestionada por la oposición y organizaciones ciudadanas que los acusan de usurpar funciones
.
La situación parecía más incierta tras la renuncia de un magistrado del Tribunal Constitucional. La víspera no hubo inauguración del año judicial, como se acostumbra con presencia del presidente del país, y hubo protestas opositoras en las puertas de los altos tribunales para exigir la renuncia de los magistrados.
Jaloneo entre líderes
Ayer, ni el presidente Luis Arce ni su ministro de Justicia, Iván Lima, se manifestaron sobre la situación. La semana pasada, el procurador general, César Siles, y legisladores oficialistas justificaron la prórroga de los magistrados alegando que no puede darse un vacío de poder
.
Una sociedad democrática exige que los cuatro órganos del Estado funcionen simultánea y permanentemente
, expuso Lima ante una delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos hace unos días. Según la Constitución boliviana, los 26 magistrados del Tribunal Constitucional, la Corte Suprema, el Tribunal Agroambiental y el Consejo de la Magistratura deben ser elegidos por el voto ciudadano de una preselección aprobada por la Asamblea Legislativa. Los comicios debieron celebrarse en octubre del año pasado, pero no se hicieron por la fractura del oficialismo en el Legislativo entre leales al ex presidente Evo Morales, jefe del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) y Arce, quien controla parte de ese partido.