"La Jornada del Campo"
Número 183 Suplemento Informativo de La Jornada Directora General: Carmen Lira Saade Director Fundador: Carlos Payán Velver
Miscelánea
Decenas de familias indígenas del municipio de Tlapa de Comonfort, Guerrero, partieron ayer en 14 camiones rumbo a los campos agrícolas de Sinaloa y Guanajuato, donde laborarán medio año.  TlachinollanDecenas de familias indígenas del municipio de Tlapa de Comonfort, Guerrero, partieron ayer en 14 camiones rumbo a los campos agrícolas de Sinaloa y Guanajuato, donde laborarán medio año. Tlachinollan

La política pública del combate al trabajo infantil indígena en México

Abelardo Rodríguez Investigador y consultante independiente

… los indígenas jornaleros que parten de diversos municipios de la Montaña alta de Guerrero son los más olvidados, abandonados y explotados, porque aparte de que están en condiciones muy precarias, es muy alto el índice de analfabetismo. Son familias completas, o a veces nada más van las madres que hacen de jefas de familia con sus hijos, porque fueron abandonadas por sus esposos, explicó un defensor de derechos humanos.”

“…. la situación se torna más dramática porque ninguna instancia del gobierno, ni el federal, el estatal o el municipal, se encarga de darles atención básica; en cada autobús viajan unas 60 personas, incluyendo los niños a quienes colocan en los pasillos, y si tienen menos de 13 o 14 años, al menos tres ocupan un asiento, y no les dan boletos; por eso cuando hay accidentes ninguna empresa responde.”

La situación de los niños indígenas en 1997 era todavía más precaria que aquella de los niños no indígenas. Datos de la Encuesta Nacional de Empleo en Zonas Indígenas (ENEZI) mostraban que había 194,000 niños y niñas entre 6 y 14 años, 2/3 niños y 1/3 niñas. Los niños y niñas entre 6 y 11 años en el mercado laboral 45% eran indígenas y 33% no indígenas. Usando el marco muestral del ENEZI se aplicó el Módulo de Trabajo Infantil (MTI) Indígena en 1999 para caracterizar el trabajo indígena infantil para bienes y servicios para el mercado y el autoconsumo. Desde entonces no existe información que permita determinar si la brecha laboral infantil indígena-no indígena ha cambiado.

El Distintivo Empresa Agrícola Libre de Trabajo Infantil (DEALTI) nace en 2010 como una política pública del gobierno federal implementada por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) para combatir y abolir el trabajo de niñas, niños y adolescentes (NNyA) jornaleros.

El DEALTI incentiva a las empresas agrícolas que contratan trabajadores del campo a: 1) demostrar el cumplimiento de las leyes y normas laborales vigentes, 2) establecer una política de cuidado y protección infantil que permita contar con reglas, guías y criterios para la realización de acciones en beneficio de los hijos de familias jornaleras; incorporar medidas para verificar y asegurar la no contratación de mano de obra infantil en ninguna de sus áreas y procesos, y 3) evidenciar prácticas de responsabilidad social en el cuidado y protección infantil. https://rb.gy/o5xyil

Hasta 2017 la STPS reportaba 649 centros de trabajo con DEALTI en 23 estados beneficiando a 265,297 personas, 35% mujeres y 65% hombres, contribuyendo al posicionamiento de la cultura de responsabilidad social dirigida a la no utilización de mano de obra infantil, el cuidado y la protección de los menores hijos de los trabajadores del campo. Además, se ha logrado el establecimiento de procesos para el desarrollo integral de las familias de los trabajadores agrícolas, con particular atención a menores. El DEALTI aún no se ha evaluado.

La estrategia del DEALTI es de corresponsabilidad social del gobierno que estipula normas y estándares para que las empresas modifiquen su infraestructura y el manejo de la población jornalera que llega a sus instalaciones, enfatizando acciones y cuidado infantil (Glockner 2018, Despolitización del trabajo infantil jornalero y la privatización del bienestar de niños migrantes internos, IBERO). La autora critica que la STPS en su protocolo de inspección del trabajo en materia de erradicación del trabajo infantil y protección al trabajo adolescente permitido no defina al trabajo infantil como un fenómeno con profundas raíces históricas de carácter social, político y económico.

Es preocupante, según Glockner, que la desincorporación del trabajo infantil agrícola y el cumplimiento de los derechos de los NNyA jornaleros (alimentación, salud y educación) estén limitados a alianzas público-privadas, incluyendo el apoyo internacional. El estudio de Escobar y colaboradores 2019, Trabajo Agrícola y la Industria Exportadora de Productos Agrícolas de México (CIESAS-Wilson Center) no menciona al DEALTI ni el análisis de Glockner.

El Estándar DEAR (Distintivo de Empresa Agrícola Responsable T-MEC) es un esquema de Certificación que la Alianza Hortofrutícola Internacional para el Fomento de la Responsabilidad Social, A.C. https://ahifores.com/ que pone a disposición del sector agrícola para el cumplimiento de los compromisos laborales que México firmó bajo el T-MEC para cumplir con las Reformas Laborales 2019 y 2021, así como las normas internacionales. Parece que el Estándar DEAR T-MEC es resultado del DEALTI.

Se ha avanzado, en 2007 el 27% del trabajo infantil agrícola en México era para la exportación, el 42% con infantes entre 6 y 14 años, y 58% con menores entre 15 y 17 años. De acuerdo con el MTI, INEGI 2018 el trabajo infantil no permitido disminuyó de 3.5 millones en 2007 a 2.1 millones en 2017. Sin embargo, es necesaria una postura clara de la STPS acerca de la reducción del trabajo infantil no solo en los productos agrícolas exportables sino también en los productos de consumo doméstico, para los cuáles parece no haber política o alianza pública-privada. Si se reconoce que los NNyA jornaleros indígenas son más vulnerables que los NNyA no indígenas, entonces cuales son las políticas enfocadas a que esos infantes o menores de edad no tengan la necesidad de migrar y trabajar. •