Más de 100 personas que padecen enfermedades renales se manifestaron frente al Congreso de Jalisco para exigir medicamentos, cobertura médica para los más de 17 mil pacientes de este tipo que viven en la entidad, la cual ocupa el primer lugar nacional en nefropatías, y que se realicen más trasplantes, pues las larguísimas listas de espera no avanzan.

Los inconformes bloquearon ayer la avenida Hidalgo, en Guadalajara, fuera de la sede de la legislatura, y como parte de la conmemoración del Día Mundial del Riñón, reprocharon la falta de atención gubernamental a los aquejados de insuficiencia renal, quienes deben someterse a dolorosos tratamientos y solventar los altos costos.

La petición central a los diputados fue que éstos cumplan con sus promesas de campaña y aprueben y pongan en operación la iniciativa Dar Vida Después de la Muerte, con la cual se pretende fomentar la cultura de la donación y facilitar los trasplantes de órganos.

Esperan trasplante casi 5 mil enfermos

Los manifestantes recordaron que esa propuesta está congelada en el Congreso de Jalisco desde 2020 y que a escala nacional es recurrente la falta de medicamentos en instituciones de salud estatales y federales, especialmente en el Instituto Mexicano de Seguro Social.

Consideraron que el primer lugar nacional de Jalisco en padecimientos renales es resultado de la mala calidad del agua y la contaminación en el lago de Chapala y el río Santiago, en cuyos alrededores la prevalencia de afecciones renales es especialmente alta.

Según la Secretaría de Salud de Jalisco, 4 mil 758 personas están en la lista de espera de un riñón en la entidad. Entre enero y febrero pasados se realizaron 69 trasplantes de riñones procedentes de donadores vivos y nueve de cadáveres.

En este contexto, la presidenta de la Asociación de Enfermos Renales del Estado de Guerrero, Miriam Fajardo, aseguró en conferencia de prensa que ofreció ayer en Acapulco que, no obstante que se ha regularizado el servicio de hemodiálisis que el IMSS ofrece en la entidad, los casi 700 aquejados en el puerto aún padecen un irregular suministro de medicamentos.