La celebración del Día Internacional de la Mujer fue pretexto para que de nueva cuenta Morena, PAN y PRI cruzaran acusaciones en las dos cámaras del Congreso, como parte de su lucha por el poder.

En esa pugna, senadoras panistas y priístas cuestionaron las políticas en materia de género del presidente Andrés Manuel López Obrador, y en un escenario similar, en San Lázaro Lidia García (Morena) reprochó a las legisladoras del blanquiazul: ¡cínicas!; sus discursos no cambian la discriminación hacia las mujeres.

A lo largo de la conmemoración, senadoras y diputadas de las distintas fuerzas se acusaron de políticas fallidas hacia ellas.

Las senadoras de Morena destacaron los logros y amplia agenda legislativa prioritaria para el sector femenino en el gobierno actual, que incluye prohibición constitucional del matrimonio infantil, sistema nacional de cuidados y protección de las jornaleras y migrantes.

En tribuna, Blanca Estela Gudiño expuso que el partido en el poder no olvida “a las indígenas, migrantes, bisexuales, lesbianas, mujeres trans y cuidadoras, ni a las niñas y adolescentes obligadas a terminar embarazos producto de la violencia sexual. A cada una de ellas les decimos: ‘sus legisladoras, no las olvidamos’”.

No obstante, Nadia Navarro (PAN) sostuvo que de nada sirven los avances legislativos ni que México ocupe un lugar vanguardista a escala global por esos avances, cuando las leyes son letra muerta y, en los hechos, este gobierno se ha dedicado a desaparecer los programas importantes, como las estancias infantiles.

En San Lázaro, panistas instalaron en sus curules cruces de color morado y la legisladora Wendy González Urrutia acusó que la actual administración ha destruido conquistas alcanzadas. Lo bueno que esto tiene solución y fecha de caducidad, porque con estos resultados, ustedes ya se van y serán recordados en la historia no como la esperanza, sino como la desgracia de México.

Ella y su compañera Ana Teresa Aranda arrancaron gritos de protesta de las filas de Morena cuando presumieron que durante los gobiernos federales del PAN se crearon instituciones y programas de apoyo a las mujeres, como el de estancias infantiles, destruidos por este gobierno.

González Urrutia acusó a la administración federal de establecer una política de atropello y despojo y de tener una bajísima calidad humana. “El rechazo, la cerrazón y la ceguera se materializan en las murallas que rodean Palacio Nacional. ‘Ni las veo ni las oigo’; esa es la actitud de este gobierno”, subrayó.

Desde Morena, Judith Tanori y Lidia García reviraron que el gobierno se ocupa de cuidar a los niños con cáncer y también en prevenir esa enfermedad, así como de proteger el medio ambiente. Ahora, expresaron, hay verdaderas estancias infantiles y no establecimientos sin cuidados que llevaron a tragedias como la de la Guardería ABC.

García cuestionó que la celebración se utilizara para reclamar presupuesto y programas sociales, y aun cuando reconoció que hay carencias, las atribuyó a herencias del pasado, y resbaló cuando dijo que López Obrador es un presidente “legitimado por 130 millones de votos… No somos un gobierno espurio, como el de Felipe Calderón; qué vienen aquí a presumir. ¡No tienen vergüenza!”