En México y algunos países de América Latina, la industria de alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas ha aprovechado la emergencia sanitaria por el Covid-19 para mercadear sus productos y limpiar su imagen, aunque éstos se asocian con el incremento de diabetes, obesidad y sobrepeso en las personas.

En la conferencia digital ¿Cómo sobrevivimos a la comida chatarra durante la pandemia de Covid-19?, Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor, expuso que las grandes compañías hacen donativos para, en apariencia, combatir el hambre, pero dentro de ellos también entregan sus alimentos y refrescos, estos últimos generan procesos inflamatorios que de ser irregulares debilitan sensiblemente el sistema inmunológico, y lanzan otras iniciativas, entre éstas para salvar a las pequeñas tienditas, aunque la cuestión es si también lo hacen a fin de fortalecer sus negocios, expresó.

Mencionó que “en las farmacias YZA, que pertenecen a Femsa –la principal embotelladora de Coca- Cola en el mundo–, se anunció que si uno compra una lata de Nido de Nestlé, ponen tres latas más, una de esa marca y dos de Nidal para llevarlo a comunidades vulnerables de Veracruz. Esto es gravísimo porque Nidal es un sustituto de leche materna y está prohibido regalar de acuerdo con el Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de Leche Materna”.

Refirió que en México se aprobó el etiquetado de advertencia para productos procesados, al cual la industria se ha opuesto y ha argumentado que esto tendría un costo de 19 mil millones de pesos. Sin embargo, ahora aprovechándose del Covid-19 hacen campañas a través de los empaques de sus productos, para enviar diversos mensajes donde se ponen de lado de la salud.

Carolina Piñeros, directora de Red PaPaz de Colombia, mencionó que la pandemia del nuevo coronavirus ha abierto más la brecha de inequidad. Señaló que un ejemplo de ello está relacionado con el acceso al agua potable en algunas comunidades, problema para el cual las bebidas azucaradas se han presentado como las grandes salvadoras.

Enrique Jacoby, ex asesor regional de nutrición y vida activa dela Organización Panamericana de la Salud, expuso que esta industria es responsable de la gran cantidad de problemas que hoy vemos en obesidad y en enfermedades asociadas a ésta, las cuales son factores de riesgo en la epidemia de Covid-19.

En la salud y la ciencia –continuó–ya se han dado pautas claras: la comida ultraprocesada mata. Por ello, agregó, necesitamos que los gobiernos actúen, porque esto es un problema de fondo político.