Sábado 25 de abril de 2020, p. 6
La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) exhortó a que en esta contingencia sanitaria, los ciudadanos, los gobiernos federal, estatales y municipales hagan a un lado los “intereses personales partidistas, ideológicos, políticos y religiosos para unirnos en la preservación de la vida”.
En un pronunciamiento, los obispos del país señalaron que “estamos experimentando la fragilidad de las instituciones y en particular del sistema sanitario y financiero”.
Invitaron “a quienes tienen el poder de decidir sobre los grandes proyectos y obras nacionales a considerar la oportunidad de destinar esos recursos, durante los meses en que muchos mexicanos no tienen trabajo, para mitigar las carencias de alimentos en muchos hogares”.
Destacó que “salud, alimentos y trabajo son exigencias ineludibles en esta emergencia sanitaria. Nos parece que el gobierno federal, estatal y municipal, junto con los empresarios, tienen la oportunidad de liderar, con todos los recursos humanos y materiales, esta nación tan plural que ahora requiere y exige unidad”.
Aparte, el cardenal Carlos Aguiar Retes, arzobispo primado de México, expuso en un video que la pandemia “nos ha puesto en una situación extraordinaria y nos ha hecho buscar caminos para responder en nuestras actividades”. Felicitó a “los sacerdotes que han sabido encontrar caminos para acompañar a nuestras comunidades”, a los que coordinan estrategias de ayuda, y a los “fieles que han respondido muy favorablemente a todas las iniciativas pastorales de manera virtual pero real”.
La CEM reconoció y agradeció “la labor del personal sanitario que expone su vida y la de su familia a diario, así como la de los encargados de reponer los productos en los mercados, de los limpiadores, de los transportistas, de las fuerzas de seguridad”.