Guadalajara, Jal.

Autoridades estatales buscan al director de la policía municipal de Tecalitlán, Hugo Enrique Martínez, para que declare sobre la desaparición de los italianos Raffaele Russo, su hijo Antonio Russo y su sobrino Vincenzo Cimmino, ocurrida el 31 de enero en la región sur de Jalisco.

El alcalde de Tecalitlán, Víctor Díaz Contreras, y el secretario de Gobierno de Jalisco, Roberto López Lara, dieron a conocer que desde el martes, tres días después de que la policía de ese municipio fue intervenida por la fiscalía y agentes estatales, estos últimos patrullan la localidad, y Martínez continúa sin ser localizado.

La fiscalía estatal negó que policías de Tecalitlán hayan declarado que detuvieron a los extranjeros y los entregaron a un grupo de civiles armados, como se difundió ayer en México y en Italia.

La fiscalía desarmó y citó a los 33 policías de Tecalitlán para trasladarlos a Guadalajara, investigarlos y supuestamente impartirles un curso de capacitación.

En una denuncia presentada el primero de febrero, familiares de los desaparecidos señalaron que policías de Tecalitlán se llevaron a los italianos en una patrulla y una motocicleta, según los últimos mensajes de voz que los extranjeros enviaron antes de que se les perdiera el rastro.

El secretario de Gobierno de Jalisco dijo en entrevista colectiva que se mantiene vigilancia en el domicilio y oficinas del jefe de la policía de Tecalitlán.

Ante las acusaciones de familiares de los italianos, López Lara respondió que el gobierno estatal no pretende revictimizar a los extranjeros con señalamientos acerca de los antecedentes penales de uno de ellos, pero reiteró que la investigación sobre las actividades que realizaban en México es importante para recabar información y hallarlos.

Agregó que desde el miércoles dependencias estatales y federales, el Ejército Mexicano y autoridades de Colima y Michoacán buscan a los ciudadanos italianos. También sostuvo que los tres desaparecidos se registraron con nombres falsos en un hotel de Ciudad Guzmán, municipio vecino de Tecalitlán, que era su base para la comercialización de maquinaria apócrifa hecha en China simulando que era de marcas reconocidas.

El alcalde Víctor Díaz Contreras, dijo en conferencia de prensa que este incidente es excepcional, pues ese municipio es tranquilo y al parecer los italianos sólo iban de paso por la localidad, ubicada 165 kilómetros al sur de Guadalajara.

Afirmó que el comisario Martínez pasó las pruebas de control de confianza e hizo carrera en diversas corporaciones policiacas de la región.

Agregó que las familias de los policías enviados a Guadalajara se han inconformado porque a sus parientes se les mantiene incomunicados; asimismo, exigen que se les dé trato digno y no sean convertidos en chivos expiatorios.

No sé si haya policías detenidos. Lo que sé es que nuestro cuerpo policiaco está en capacitación en la academia de Guadalajara. Efectivamente, el comisario no está, eso me consta. Se están elaborando las actas administrativas para saber por qué no se presentó para hacer las indagatorias pertinentes, dijo el edil.