La oficina en México del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés) alertó que a tres meses de los sismos de septiembre aún hay familias con niños en Chiapas, Ciudad de México, Morelos, Oaxaca y Puebla en situación de vivienda precaria, sin acceso a escuelas o servicios de salud.

Por eso, anunció que de enero a junio de 2018 aplicará un plan de recuperación temprana en las regiones más afectadas, que incluye prevenir la deserción escolar, por lo que impulsará un sistema de observación para los niños que todavía se encuentren sin escuela; asimismo, se fomentará la recuperación sicoemocional de los menores y garantizará las condiciones de sanidad con acceso a baños y agua potable.

El Unicef destacó que tras entrevistar a 900 niños y adolescentes de los lugares con daños para conocer sus necesidades y prioridades, aún hay acciones pendientes para garantizar los derechos de la infancia afectada por los terremotos.

También realizará una evaluación sectorial de las medidas de protección y la respuesta institucional en los estados afectados, además del impacto directo e indirecto de los terremotos en la niñez y buscará dar prioridad a la pequeños y adolescentes en los planes de reconstrucción, lo que implica tomar en cuenta sus necesidades específicas en los programas de protección social.

De la misma manera, el fondo documentará la experiencia de lactancia durante la emergencia y posibles violaciones al Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos, el cual prohíbe la promoción inapropiada de artículos que sustituyan la leche materna

Christian Skoog, representante del Unicef en México, señaló en un comunicado que es prioritario, tanto para el futuro de la infancia afectada como para el desarrollo del país, que estas familias reciban el apoyo adecuado para garantizar que sus hijos vivan bajo techo seguro, asistan a la escuela y vean cubiertas todas sus necesidades básicas.

En un informe de resultados, a tres meses de los sismos, Unicef informó que con el apoyo de donaciones se instalaron 34 espacios amigables para la infancia y cien temporales de aprendizaje, en beneficio de 3 mil 126 y 4 mil 329 niños, respectivamente.

Además se distribuyeron 410 materiales denominados escuelas en una caja (suministros escolares para el regreso a clases) en provecho de 16 mil 400 niños, 20 estuches de desarrollo infantil temprano, para 800 niños menores de cinco años y 2 mil 400 de higiene para igual número de familias.

El organismo también brindó capacitación a 353 maestros de forma directa y 5 mil 296 indirectamente, así como a 171 facilitadores de los espacios amigables para la infancia sobre herramientas y estrategias de apoyo sicoemocional.