Madrid.

Miles de personas salieron a las calles de las principales ciudades de Cataluña este jueves para exigir la libertad de los presos políticos, en alusión a nueve integrantes del gobierno catalán y dos líderes independentistas encarcelados por orden de la Audiencia Nacional. En Barcelona las concentraciones se llevaron a cabo en las inmediaciones del Parlamento y en la plaza de Sant Jaume, donde se encuentran las sedes del Ayuntamiento y de la Generalitat.

En Cataluña se vivió un día negro por lo que consideran un atropello sin precedente a sus derechos como pueblo que elige libremente a sus dirigentes. Decenas de ayuntamientos pusieron sus banderas a media asta, con crespones negros y colgaron pancartas; en el de Barcelona se leía ¡Presos políticos, libertad!. Además, se suspendieron los actos oficiales en numerosos gobiernos municipales, como parte del protocolo de duelo.

Una multitud salió a las calles en cuanto se supo la noticia de que el ex vicepresidente Oriol Junqueras y ocho ex consejeros del gobierno fueron trasladados a las cárceles de Estremera y Alcalá.

En Barcelona miles de personas corearon consignas como: Es Puigdemont nuestro presidente. No estáis solos. Huelga general. Nuestro gobierno, nuestro Parlamento. Independencia y Presos políticos, libertad, así como cánticos pro independencia y el himno de Cataluña Els Segadors. Entre los manifestantes también se encontraban miembros de diversas formaciones políticas y de la sociedad civil, como Agustí Alcoberro, vicepresidente de la Asamblea Nacional Catalana, y Marcel Mauri, portavoz de Òmnium Cultural.

Alcoberro llamó a la gente a transformar la tristeza y la indignación en una herramienta que nos estimule a luchar, ya que los hechos de este jueves son un ataque al autogobierno y a la autoestima. Y no lo vamos a tolerar.

Se convocó a otra movilización para el 12 de noviembre y se habló de una huelga general, aunque aún no hay fecha.