Berlín.

Una gran muestra de la obra del pintor y grabador británico Lucian Freud, considerado uno de los artistas figurativos más importantes del arte contemporáneo, podrá visitarse desde hoy en el Museo Martin Gropius-Bau de Berlín.

Retratos de su madre, la musa más destacada del creador

Más de medio centenar de grabados al aguafuerte –técnica que se efectúa tomando como base una plancha de aleación metálica–, dos pinturas y una acuarela del creador, fallecido en 2011, se expondrán por primera vez en su ciudad natal y de la que salió al huir junto a su familia, siendo un niño, cuando en 1933 Adolf Hitler arribó al poder en Alemania.

Con el nombre Closer, la exposición da cuenta de la evolución de un pintor que se inició en el surrealismo pero posteriormente se inclinó hacia una pintura figurativa y realista.

Al respecto, la muestra presenta un total de 51 grabados que evidencian los paralelismos existentes entre esta técnica y su obra puramente pictórica, en la que abundaban plantas, animales y retratos de personajes desnudos carentes de toda expresión de sentimientos.

Entre las obras que se pueden visitar en el Gropius-Bau, destacan retratos de su madre, que hasta su muerte en 1989 fue su musa más destacada, así como otros del pintor australiano Leigh Bowery, a quien Freud conoció en los años 90 y pintó en numerosas ocasiones hasta su fallecimiento por sida en 1994.

Lucian Freud, nieto del célebre sicoanalista Sigmund Freud, nació en Berlín en 1922. A la edad de 11 años, coincidiendo con la toma del poder del régimen nacionalsocialista en Alemania salió con su familia que huyó a Reino Unido, país que le concedió la nacionalidad en 1939.