Sociedad y Justicia
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Hay desinterés y riesgo de imposición, alerta ex vocero de alumnos

En estos momentos lo mejor es no realizar el Congreso del Politécnico
 
Periódico La Jornada
Viernes 10 de marzo de 2017, p. 35

Luego de que el movimiento estudiantil de 2014 en el Instituto Politécnico Nacional (IPN) dio por terminado el paro de labores para discutir su pliego petitorio en un congreso, la atención sobre el tema se ha diluido y han surgido muchas discrepancias sobre su organización, por lo que en estos momentos lo mejor sería no llevarlo a cabo.

Afirmó lo anterior Donovan Garrido, estudiante de posgrado de la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura (ESIA) del IPN, quien advirtió que el riesgo de seguir adelante con dicho encuentro, en una situación de desinterés como ésta, es que las autoridades impongan diversos aspectos que los estudiantes lograron frenar con sus movilizaciones de hace tres años.

Logros del movimiento de 2014

La mejor opción en este momento podría ser que no se realizara, porque si nos ponemos a preguntar a los chavos sobre el congreso, la mayoría no sabría ni qué contestar, lamentó Garrido, quien fue uno de los voceros del movimiento estudiantil del Poli.

En charla con La Jornada, el activista recordó que el paro de actividades de 2014 tuvo logros importantes, como evitar la incorporación de las vocacionales al Sistema Nacional de Bachillerato, frenar el reglamento interno que había propuesto la entonces directora del IPN, Yoloxóchitl Bustamante, y rechazar el plan de estudios de la ESIA.

Además, consideró Garrido, se logró que el instituto se comprometiera a formar un órgano de seguridad interna que sustituya a la policía bancaria e industrial, y se echaron abajo las pensiones de los ex directores generales.

Sin embargo, todo lo que pedimos, como democratización, aumento de becas, sacar a los porros y mejoramiento de las instalaciones, nos lo mandaron a un congreso donde se supone que íbamos a transformar al IPN, pero todo fue para postergar la discusión.

Tres años después del movimiento estudiantil, creo que el alumno promedio del Politécnico no está interesado en el congreso, y tendríamos que ver si realmente es una opción de cambio, porque ante la poca participación de la gente, las autoridades podrían aplicar todas las políticas que frenamos en 2014, y de esta forma legitimarlas.

En opinión del activista, otro factor que en estos momentos impide su realización adecuada es que han surgido cada vez más diferencias entre grupos de estudiantes, trabajadores y académicos sobre la manera en que debe formarse la comisión encargada de organizarlo.