Integrantes del movimiento No al Gasolinazo de Chihuahua tomaron diversas casetas de peaje y permitieron libre tránsito a vehículos particulares y de carga para repudiar el incremento a los combustibles aplicado por el gobierno federal en enero pasado.

Los manifestantes calificaron de burla que los precios del diésel y la gasolina bajarán dos centavos por litro para los siguientes tres días y expresaron que siguen a la espera de que el gobierno estatal abarate el trámite por revalidación vehicular de mil 300 a 383 pesos.

Este sábado se apostaron en las casetas de Sacramento –cerca de la capital de Chihuahua–, Camargo-Saucillo, Cuauhtémoc, Villa Ahumada y Jiménez-Sabalza; además efectuaron protestas en al menos 10 municipios y bloquearon la carretera a la ciudad de Madera.

Los 100 habitantes de los municipios chihuahuenses de Madera, Guerrero y Cuauhtémoc, que tomaron el viernes pasado las instalaciones de Petróleos Mexicanos de esta entidad e impidieron la entrada y salidas de pipas, fueron desalojados por 300 policías ayer.

En Mazatlán, Sinaloa, unos 300 adheridos al movimiento ciudadano contra el gasolinazo protestaron en calles principales y se dirigieron al palacio de gobierno, donde acusaron al presidente Enrique Peña Nieto de favorecer los intereses de trasnacionales, antes que apoyar a los mexicanos cada vez más empobrecidos.

En el contingente participaron integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, El Barzón, del Frente Amplio Mazatleco, ex usuarios de casas de estudiantes de la Universidad Autónoma de Sinaloa y del Consejo Ecológico de Mazatlán, entre otras organizaciones.