Londres.

El escándalo de abusos sexuales en el futbol británico, que podría expandirse a otros deportes, podría incluir víctimas a partir de los cuatro años.

La investigación nacional sobre vejaciones a menores en el mundo del balompié ha recibido 819 denuncias, indicó la policía inglesa y hay 429 víctimas que tenían entre cuatro y 20 años cuando fueron agredidas.

Se han identificado 155 posibles sospechosos y 148 clubes implicados, de la Liga Premier a las divisiones de aficionados, aunque no todos están bajo investigación. Muchos de los casos se remontan a hace más de 20 años e implican a entrenadores y visores de categorías inferiores de clubes profesionales y aficionados.

Aunque la inmensa mayoría de notificaciones están relacionadas con el futbol, algunas afectan a otros deportes, señaló el Consejo de Jefes de Policía Nacional.

Un antiguo profesional llamado Andy Woodward, hoy de 43 años, quien jugó en el Sheffield United, abrió el camino a muchas otras víctimas al explicar en noviembre pasado los abusos que sufrió de Barry Bennell, un ex entrenador de las categorías inferiores del Manchester City, Crewe Alexandra y Stoke City.

Desde entonces el escándalo no ha dejado de crecer y otros ex profesionales salieron a revelar sus casos.