A la agresión física de la senadora Ana Gabriela Guevara le siguieron ataques en redes sociales, donde comentarios misóginos mostraron el castigo social por no obedecer el canon tradicional femenino.

Cuando no encarnas el prototipo femenino y con tu forma de ser cuestionas el mandato de género hay consecuencias sociales; en este caso, además de golpes hay insultos, señaló la feminista Karen Dianne Padilla.

El pasado domingo, cuando la medallista olímpica transitaba a bordo de su motocicleta por la carretera México-Toluca, una camioneta la embistió por detrás. Luego de levantarse, pues el impacto la tiró, le reclamó al chofer del vehículo, quien en respuesta descendió con otros tres hombres y entre todos la golpearon.

La misoginia que se mostró en golpes, y ahora en tuits y comentarios, es también para hacer saber que no se tiene el derecho a transitar de la misma forma que los varones (en una moto) y ser independiente, añadió Padilla en entrevista.

No deja de sorprender, dijo, que en aras de la libertad de expresión no se moderen los discursos. Es necesario que Facebook y Twitter censuren esos comentarios violentos que, si bien se hacen en un lugar virtual, el odio se siente muy real.

Lo ocurrido a la atleta nos descorazona a todas. Ni tener fuero o ser una figura importante te exenta de sufrir violencia; todas hemos pasado de una u otra forma por ello. Este miércoles la Junta de Gobierno del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación condenó enérgicamente los hechos.