Moscú.

Antes de la publicación hoy de un nuevo informe sobre el presunto dopaje masivo de deportistas rusos patrocinado por el Estado, empeoraron las relaciones entre Rusia y la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).

Esta última protestó por no haber sido consultada antes del nombramiento de la ex pertiguista Yelena Isinbayeva al frente de la junta que supervisará las reformas en la ahora suspendida agencia antidopaje rusa.

Isinbayeva, quien se retiró después del veto al equipo ruso de atletismo en Río 2016, sostuvo que las afirmaciones de la AMA no están probadas, y se espera que ahora intente persuadir para que se levante el castigo a la agencia rusa.

Según la AMA, esta medida que cuenta con el respaldo del Ministerio de Deportes ruso, rompe el acuerdo que le otorgaba un papel en los nombramientos importantes antes de ser anunciados.

Por otra parte, se anunció que el boxeador ruso Misha Aloian y el pesista rumano Gabriel Sincraian fueron despojados de las preseas ganadas en Río, por dopaje.