Tel Aviv.

El ex presidente israelí Shimon Peres, de 93 años, se encontraba en estado grave pero estable la noche del martes al miércoles después de su hospitalización urgente tras sufrir un importante accidente vascular cerebral, indicaron sus médicos y su oficina.

Después de concertarse, los médicos llegaron a la conclusión de que nada indicaba que esté justificada una operación por el momento. Peres se encuentra en estado grave pero estable, en cuidados intensivos, dijeron sus médicos y su oficina en un comunicado conjunto.

El ex presidente fue internado en el hospital Tel Hashomer tras sufrir un derrame cerebral. Está consciente y está recibiendo un tratamiento apropiado, había precisado un comunicado de su oficina.

Peres sufrió un accidente vascular cerebral grave, acompañado de un derrame, dijo por la noche, en una breve intervención ante los medios, Yitzhak Kreiss, director del hospital Tel Hashomer, donde ingresó el noveno presidente de Israel, en Ramat Gan, no muy lejos de Tel Aviv.

Se le aplicó anestesia y luego se le ingresó en cuidados intensivos, precisó el médico, que agregó que Peres era asistido por respiración artificial.

Me mantengo optimista pero vivimos horas difíciles, dijo el hijo del ex presidente, Chemi Peres, a los periodistas, delante del hospital.

Al parecer tendremos que tomar decisiones difíciles pero no de momento, añadió, sin aportar más precisiones.

Todo el pueblo espera

Los familiares de Peres recibieron mensajes de apoyo de todo el mundo, declaró su hijo. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reaccionó rápidamente a la noticia de la hospitalización, acaecida el día del aniversario de la firma en Washington, en 1993, de los primeros acuerdos de Oslo, de las que Peres fue uno de los artífices.

Le deseo al expresidente una recuperación rápida. Shimon, te queremos y todo el pueblo espera tu recuperación, escribió Netanyahu en su página de Facebook.

El estado de salud del ex presidente israelí Shimon Peres, de 93 años, fue reportado grave pero estable en el área de cuidados intensivos, tras ser hospitalizado de urgencia debido a un derrame cerebral, indicaron sus médicos. Está consciente y recibe tratamiento, precisó un comunicado de su oficina. Me mantengo optimista, pero vivimos horas difíciles, señaló su hijo Chemi Peres. En la imagen, el ex gobernante captado en septiembre de 2015Foto Xinhua

Sigo con preocupación las noticias del hospital, reaccionó Reuven Rivlin, que sucedió a Peres en la presidencia del país en 2014, y rezo con todo el pueblo por la recuperación de mi amigo Shimon.

Te deseamos, nuestro querido expresidente Shimon Peres, una recuperación rápida para que puedas, de nuevo, ofrecernos tus sabias palabras, tuiteó el jefe de la oposición laborista, Isaac Herzog.

Peres sufrió en enero pasado dos alertas cardíacas en diez días. Fue hospitalizado el 14 de enero tras un accidente cardiovascular menor, que requirió la implantación de un catéter para ensanchar una arteria. Salió del hospital al cabo de cinco días. Pero volvió después a causa de una arritmia.

El secreto de la longevidad

Shimon Peres, uno de los artífices de los acuerdos de paz de Oslo de 1993, fue galardonado con el premio Nobel de la Paz en 1994, conjuntamente con el ex primer ministro israelí Yitzhak Rabin y el ex presidente palestino, Yasser Arafat, ambos fallecidos.

Último político vivo de la generación de los padres fundadores de Israel, Peres, ministro dentro de numerosos gobiernos, asumió en varias ocasiones el cargo de primer ministro y, después, el de presidente del Estado de Israel de 2007 a 2014.

A sus 93 años, ha seguido siendo una figura muy activa a través de su Centro Peres para la Paz, que promueve la convivencia entre judíos y árabes. Entre sus dos ingresos en el hospital en enero, afirmó su voluntad de volver al trabajo y continuar sirviendo a nuestro bello país que tanto amo.

Presente en la escena política desde la creación de Israel en 1948, un día confesó que el secreto de su longevidad consiste en hacer gimnasia cada día, comer poco y beber uno o dos vasos de buen vino.

La noticia coincidió con una etapa del conflicto palestino-israelí, que tanto ocupó a Peres, particularmente sombría: no hay perspectivas de solución a la vista y la idea de que los acuerdos de Oslo están muertos va ganando terreno poco a poco.