Opinión
Ver día anteriorMiércoles 31 de agosto de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Astillero

Narro reitera su priísmo

Recuperar a jóvenes

Alvarado, Tv UNAM, Juan Gabriel

Repunte delictivo 2016

Foto
EN CHIAPAS, PADRES DE FAMILIA REABREN ESCUELAS. En Comitán, Chiapas, padres de familia decidieron realizar la limpieza en diversas escuelas cerradas, para presionar a los integrantes de la CNTE a que regresen a dar clases. Mientras, maestros de las secciones 7 y 40 del SNTE bloquearon cinco puntos en Tuxtla Gutiérrez para exigir la abrogación de la reforma educativa y la reinstalación de la mesa de diálogo con carácter resolutivoFoto Cuartoscuro
A

sus 67 años (nació en Saltillo, Coahuila, el 5 de diciembre de 1948), el médico José Ramón Narro Robles hizo una táctica reivindicación de su priísmo, ante una sesión plenaria de senadores del partido tricolor, a los cuales acudió a informar sobre sus actividades como secretario federal de Salud.

Narro Robles fue rector de la Universidad Nacional Autónoma de México de 2007 a 2015, como continuidad del grupo encabezado por Juan Ramón de la Fuente Ramírez, quien a su vez ocupó esa rectoría de 1999 (impulsado o, más precisamente, colocado por el entonces presidente de la República, Ernesto Zedillo Ponce de León) a 2007. De la Fuente ha sido mencionado con frecuencia como aspirante a cargos de elección popular y, en especial, a la Presidencia de la República, pero su condición relativamente independiente ha hecho inviables tales pretensiones.

Narro Robles ha sido mencionado de manera tangencial en la baraja inducida de presuntos aspirantes a la candidatura presidencial priísta de 2018, invocando la popularidad que correspondería a un rector de una casa de estudios con tanta resonancia social. Los promotores de la eventual postulación del saltillense hablan de la muy buena relación que dicen hay entre Narro y Peña Nieto y lo novedoso que resultaría para el desfallecido PRI presentar una carta ajena al perfil clásico de los priístas.

En aras de tales posibilidades, Narro decidió ayer desempolvar su credencial de tres colores y sostener un discurso de militante partidista en campaña, con énfasis en recuperar a los jóvenes para el interés electoral del octogenario partido: El discurso de lo social es nuestro, ha sido nuestro y debe seguir siendo nuestro; tendremos un laboratorio muy cercano con el 17 y tendremos una enorme necesidad de convencer a la población de que lo que tenemos es un proyecto de país que tenemos que seguir defendiendo, dijo el priísta que fue rector, quien defendió el derecho de cada cual a tener sus credos, sus creencias, sus orientaciones y sus militancias políticas, y yo nunca he renunciado a mi militancia como miembro del PRI.

El autodestape de Narro como priísta, en busca de su destape como candidato, podría no alcanzar el máximo objetivo en 2018, pues la pelea entre los grupos punteros cada vez se vuelve más enconada, con un notable margen de diferencia (a estas alturas, hoy) a favor del grupo de Luis Videgaray Caso (es decir, de José Antonio Meade o del propio secretario de Hacienda). Pero el ex rector de la UNAM podría ganar con estas maniobras actuales (o las anteriormente hechas, en la propia casa de estudios) una postulación a otro cargo importante o, finalmente, insertar a su grupo político en los cálculos necesarios para la resolución del enigma de la sucesión presidencial.

Al actual rector de la UNAM, el también médico Enrique Luis Graue Wiechers, le ha vuelto a brotar un problema que parecía bajo control. Nicolás Alvarado Vale (NAV), director de Tv UNAM, publicó en Milenio un artículo a título personal, no como funcionario, respecto de Juan Gabriel. En pleno ejercicio de su libertad y, a juicio de quien esto teclea, con congruencia y honestidad intelectual (así es, así ha sido NAV), calificó al cantante y compositor, recién fallecido, de uno de los letristas más torpes y chambones en la historia de la música popular, todo sintaxis forzada, prosodia torturada y figuras de estilo que oscilan entre el lugar común y el absurdo (http://goo.gl/xQoG7b).

Alvarado relató su premura para armar un programa de análisis sobre Juan Gabriel, que pasará en Tv UNAM este viernes, reconociendo el valor icónico del Divo de Juárez, que le otorga derecho a ser materia de análisis e incluso de homenaje en todos los espacios, incluso en uno administrado por la Universidad Nacional, institución que estudia todo lo digno de ser estudiado, lo que por fuerza incluye también los fenómenos de masas que marcan la cultura. Añadió que su postura crítica no lo lleva a la ceguera cultural ni a la insensibilidad sociológica: sé bien que soy uno de los poquísimos mexicanos que no asumen a Juan Gabriel como un ídolo.

Pero también señaló que su rechazo al trabajo de Juan Gabriel es, pues, clasista: me irritan sus lentejuelas, no por jotas, sino por nacas; su histeria, no por melodramática, sino por elemental; su sintaxis, no por poco literaria, sino por iletrada. Con su artículo, Alvarado se colocó insólitamente como número uno en la lista de temas relevantes en Twitter (trending topics), con una aplastante mayoría de comentarios en contra.

El tribunal popular instantáneo, como un tecleador astillado se ha referido al cruce de opiniones bajo el amparo de un pajarito azul, colocó al opinante en línea de fusilamiento, pero no sólo por sus polémicas expresiones, sino por el hecho de ser el director de la televisión de la universidad pública más importante del país. Para muchos miembros de esa comunidad ha sido inaceptable que a ese cargo haya llegado alguien sin relación anterior con la UNAM y proveniente del ámbito de la televisión comercial, en especial Televisa. Con su crítica a Juan Gabriel, bien escrita y argumentada, el mencionado funcionario reavivó la recolección de firmas en su contra y la exigencia de que sea relevado. Pero, ¿qué necesidad?

Enrique Peña Nieto reconoció ayer el repunte de los delitos de alto impacto en lo que va del año, en comparación con el anterior. Anunció, en ese sentido, algo así como una nueva estrategia para concentrar esfuerzos contra la delincuencia en 50 municipios del país, en los que se cometen 42 por ciento del total nacional de esos delitos. Y reiteró la postura de responsabilizar a los gobiernos estatales, exigiéndoles que asuman su obligación y compromiso, pues las fuerzas federales sólo estarán para respaldar a las locales de manera subsidiaria y temporal. Mmm.

Y, mientras la PGR se niega a crear una fiscalía especial para los hechos de sangre en Asunción Nochixtlán, Oaxaca, ¡hasta mañana!

Twitter: @julioastillero

Facebook: Julio Astillero