La madrugada de ayer un hombre estuvo a punto de ser linchado por pobladores de San Bartolo Ameyalco, en la delegación Álvaro Obregón, luego que, presuntamente, junto con otras dos personas, intentará robar un vehículo estacionado.

De acuerdo con el reporte de policías de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México, poco después de la una de la madrugada, dos de los presuntos delincuentes fueron descubiertos cuando estaban abordo de un automóvil Tsuru.

Al percatarse que los vecinos comenzaron a reunirse, los sospechosos aceleraron la marcha del vehículo para huir, sin darse cuenta que un tercer sujeto no había logrado subir al auto.

El presunto ladrón, de entre 25 y 30 años, fue rodeado por un grupo de personas que lo sometió y empezó a golpearlo, mientras que otros colonos hicieron repicar las campanas de la iglesia.

En poco tiempo, más de 200 personas estaban reunidas en el centro de San Bartolo Ameyalco; muchos se unieron a la golpiza que propinaban al hombre retenido. Los pobladores le exigían que ubicara a sus cómplices, además de preguntarle cuántos robos había cometido.

Justo cuando pretendían trasladarlo al kiosco del pueblo, llegaron policías de la Unidad de Protección Ciudadana Alpes de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México y una ambulancia de la Cruz Roja.

Los vecinos formaron un cerco para impedir el paso de los uniformados, pero por intervención del párroco de la iglesia los agentes lograron entrar y rescatar al herido, que fue trasladado a un hospital.

De acuerdo con habitantes de San Bartolo, en los días recientes han sido víctimas de varios robos, pese a las mantas ubicadas en el pueblo en las cuales advierten a posibles ladrones que serán linchados de ser descubiertos. Los pobladores son aguerridos.

No es la primera vez que los habitantes de San Bartolo Ameyalco toman la justicia en sus manos; apenas el pasado diciembre, hubo otro intento de linchamiento contra un joven que presuntamente intentó robar en una casa.

Fue sometido por el dueño de la vivienda, quien después de tocar las campanas, fue apoyado por otros habitantes, quienes golpearon al presunto ladrón y lo ataron a un poste. Tras una negociación de las autoridades con la gente, fue rescatado.

Otro hecho relevante que marcó la vida de los pobladores de San Bartolo Ameyalco fue el enfrentamiento que tuvieron con elementos de granaderos en mayo de 2014 por la defensa del agua y su manantial.

La comunidad se organizó enfrentó al cuerpo de seguridad: el saldo fue de más de una centena de heridos, entre los que había vecinos y uniformados, algunos con lesiones graves.