La ventaja que consiguió el América en el partido de ida de la final de la Liga de Campeones de la Concacaf, tras vencer 2-0 a Tigres, no es garantía para conseguir el título, pues faltan 90 minutos y todo puede pasar, aseguró Ricardo Peláez, presidente deportivo de las Águilas.

El título aún no lo tenemos en la bolsa. En 2013 íbamos perdiendo 2-0 al 90. Esto puede revertirse, hay que estar concentrados, ordenados y conscientes de que todavía no hemos ganado nada, declaró ayer a su regreso de Monterrey, donde el miércoles se disputó el primer duelo de la serie.

Rechazó que el triunfo haya servido para callar bocas y destacó que el cuadro americanista trabaja para ganar y dar alegría a los aficionados, que eso es importante en esta institución.

Peláez se mostró satisfecho por el desempeño de las Águilas en el Volcán, pues consideró que se vieron equilibradas, supimos aguantar cuando ellos atacaron fuerte y pudimos hacerles daño en el momento preciso.

En tanto, Osvaldo Martínez se refirió a la riña al término del partido, cuando los felinos Nahuel Guzmán y Guido Pizarro se abalanzaron sobre él. Dijo que nunca quiso ofender a nadie con su festejo tras anotar el segundo gol del cotejo.

Son cosas que siempre pasan. Yo no me burlé de ellos; si lo tomaron así, están equivocados, aseguró, y agregó que lo más importante es que el equipo hizo un partido perfecto porque pudimos sacar el resultado.

Peláez y Martínez señalaron que antes de pensar en el duelo de vuelta –el miércoles 27 de abril en el estadio Azteca– deben vencer este sábado al Toluca para asegurar matemáticamente su pase a la liguilla.

Por otro lado, al término del entrenamiento de Tigres, Pizarro encaró ayer a aficionados que lo insultaron por la derrota ante el América, pero el personal de seguridad del equipo alejó al jugador del lugar.