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Presentan libro del autor publicado por Ediciones Era, que estrena sede en la colonia Roma

Vivimos una época muy negra y debemos resurgir, opina Jorge Aguilar Mora

Incluye ensayos sobre 1799 y 1880; escribirá uno por cada año del siglo XIX, adelanta

 
Periódico La Jornada
Miércoles 23 de septiembre de 2015, p. 7

Con el libro Sueños de la razón 1799 y 1800: umbrales del siglo XIX, el narrador, poeta y ensayista Jorge Aguilar Mora empieza un trabajo ingente: escribir un ensayo por cada año de ese siglo. Es un proyecto de vida, pero comenzado ya tarde, dice el escritor a La Jornada.

Ese volumen, publicado por Ediciones Era, reúne el pensamiento político, filosófico, social, económico y, sobre todo, cultural que se dio en el cambio de siglo. Comienza por 1799 ante las discusiones que se vivieron en otros cambios de siglos por saber en qué año termina uno y comienza el otro.

Después de varios años de investigación, lectura y relectura, dio inicio a la escritura de estos dos primeros años, reunidos en un solo tomo, y con un narrador que utiliza el tiempo presente. El pasado sí existe para dar contexto a algún tema, pero el futuro no.

“Estoy investigando todo el siglo XIX. A veces es imposible tener límites, pero ya he sacado notas y fichas de los libros sobre esos cien años. Llegó un momento en que decidí que necesitaba comenzar de alguna manera porque seguía yo posponiéndolo, dije: ‘nunca voy a terminar a tenerlo todo listo antes de escribirlo’. Tenía que comenzar a escribir. De los demás años tengo fragmentos, pero debía comenzar por algún lado. El proyecto es un ensayo por año, son casi novelas”, señala Aguilar Mora, autor de Una muerte sencilla, justa, eterna: cultura y guerra durante la Revolución Mexicana.

Eligió el siglo XIX porque era el principio. En realidad la idea comienza con la Revolución Francesa, pero hay que ponerle un marco referencial, formal, y la intención era que las ideas de la modernidad, lo que se llama modernidad, comienza en esa época con la Revolución Francesa; es una manera de decirlo porque nada comienza en ningún lado. Te das cuenta de que es muy difícil decir cuándo comienza qué. Nietzsche tenía razón: eso de buscar el origen es una tontería; no hay orígenes, pero en fin, hay que empezar por algún lado.

La decisión de escribir sobre ese siglo se tomó entre los años 80 y 90 del siglo pasado. “Sentía que terminaba un mundo. Se estaban acabando muchos valores o se transformaban los valores de manera brutal. En 1992 nació mi hijo (Diego, a quien dedica el libro) y me pregunté: ‘¿qué le voy a contar?, ¿qué valores le voy a enseñar o qué le voy a dar yo como padre? Le voy a dar mis valores, sí, pero no van a ser los de su mundo.

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Jorge Aguilar Mora explora el pensamiento político, filosófico, social, económico y cultural en el umbral del siglo XIXFoto José Antonio López

Es otro mundo el que está surgiendo, pero entonces tengo que explicarle por qué no nos vamos a entender, o por qué sí nos vamos entender o cómo, le tengo que explicar de dónde vengo. Claro, es muy pretencioso pero decía: vengo de la Revolución Francesa, tengo todos esos valores, y en lo que es un país como México desde la independencia; ahorita todo eso ya no sirve para nada, pero me quedé con la idea de que había un país llamado México, una nación mexicana que nació en la época de 1810. Son valores de finales del XVIII y principios del XIX, en realidad del Renacimiento, pero también de los griegos. Pero había que comenzar por algún lado y decidí que sería el siglo XIX.

Un siglo que es el de los grandes pensadores, Goethe, Schiller, Humboldt, los hermanos Schelling, Madame de Stäel y tantos otros que contribuyeron a repensar la sociedad y el individuo, capaces de estudiar y discutir sobre cualquier tema.

–¿Se acabaron esos pensadores?

–Sí. Pero creo que es el mismo conocimiento lo que nos ha llevado a eso, la misma evolución del conocimiento, lo que creemos que es el conocimiento, es lo que impide que haya gente así. No es que se haya acabado la capacidad humana; se han acabado los horizontes de ese conocimiento.

–Hablaban de poesía, teatro, religión, filosofía, ingeniería y arquitectura.

–Eso ya no lo tenemos.

–Entonces, ¿que nos queda?

–Rehacerlo. Inventarlas de nuevo.

Contra la especialización

–¿Y la especialización del conocimiento que tanto se pregona?

–Sí hay especialización, exageramos en ésta. Los multiculturalistas tienen razón en estar en contra de la especialización. Hay que reconstruir otra vez todos los valores y creo que se va a dar. Estamos en una época muy negra, pero tenemos que resurgir.

El libro Sueños de la razón… será presentado hoy a las 19 horas en la nueva sede de Ediciones Era (Mérida 4, colonia Roma).