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Es una ópera bufa estrenada en 1832 y de las más representadas a escala mundial

Elíxir de amor, de Donizzeti, inicia su temporada en el Palacio de Bellas Artes

Del cielo cae la respuesta para un joven desdeñado por una caprichosa mujer

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Sólo cuatro funciones se presentarán de la ópera bufa Elíxir de amorFoto cortesía del INBA
 
Periódico La Jornada
Domingo 15 de febrero de 2015, p. 4

En un pueblito se teje una historia de desamor. Nemorino está enamorado de Adina, una terrateniente que desdeña al joven, quien desesperado busca cómo lograr el amor de la caprichosa mujer. Es el inicio de la ópera Elíxir de amor, de Gaetano Donizzeti, una de las más representadas a escala mundial, que inicia su temporada este domingo en el Palacio de Bellas Artes.

Dividida en dos actos, Elíxir de amor es una ópera bufa estrenada en 1832 en Milán, Italia, y en México en 1842 en el teatro Principal. En el Palacio de Bellas Artes su estreno fue un siglo después. El libreto es obra de Felice Romani, quien a su vez se basó en Le philtre (El filtro) de Eugène Scribe. Los personajes principales son Nemorino, Adina, el sargento Belcore y el charlatán Dulcamara, quien se presenta a sí mismo como doctor enciclopédico.

Adina, vanidosa, ha rechazado en varias ocasiones al pobre Nemorino, un chico ingenuo, honesto y noble, quien anhela una poción como la que unió a Tristán e Isolda. Un elíxir de enamoramiento para que por fin su sueño sea realidad. Y del cielo le cae la respuesta: en globo llega el charlatán prometiendo menjurjes que quitan las arrugas, devuelven la vitalidad, casan a los solteros, y todo el pueblo cae rendido ante el líquido, pagando la cantidad que sea por él.

Nemorino, más enamorado y desesperado que nunca, le pide a Dulcamara que le venda una poción de amor. Y Dulcamara ve entonces una pequeña mina de oro en la desesperación de Nemorino. Y le vende, sí, una poción, que no es otra cosa que vino... Deberá beberlo y con eso Adina lo amará. Pero, no puede beberlo de inmediato, tiene que esperar 24 horas, que son las que el charlatán necesita para huir del pueblo.

El joven no tiene la paciencia entre sus virtudes, así que se lo toma de inmediato y se embriaga en poco tiempo, y en la borrachera desdeña a Adina, quien se pregunta por qué su enamorado está tan feliz. Y decide encelarlo provocando al sargento Belcore, quien le había propuesto matrimonio. La boda está a punto de realizarse y le pide:

Espera un solo día por favor, mañana te arrepentirás y lo lamentarás igual que yo, pero la decisión está tomada. Adina se casará ese mismo día porque Belcore será enviado al día siguiente a una nueva guarnición.

Nemorino necesita otra ración de elixir de amor para que por fin su amada le corresponda, pero todo va de mal en peor y por un momento pareciera que el desafortunado joven terminará enlistado en el ejército, sin amor y sin dinero.

Con Elíxir de amor la Ópera de Bellas Artes inicia su temporada 2015, con el coro y la orquesta del Teatro de Bellas Artes, bajo la dirección de Juan Carlos Lómonaco y Jorge Piña como director de escena.

Son sólo cuatro funciones en las que participan egresados o integrantes del Estudio de Ópera de Bellas Artes, excepto por el tenor Víctor Hernández y el bajo Noé Colín, quienes llevan los papeles de Nemorino y Dulcamara, respectivamente. Adina es interpretada por Patricia Santos, Belcore por Alberto Albarrán, y la mejor amiga de Adina, Giannetta, estará a cargo de la mezzosoprano Gabriela Flores.

Las funciones son los domingos 15 y 22 de febrero a las 17 horas y el martes 17 y jueves 19 a las 20 horas.