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Lució en una plataforma giratoria mientras el presidente de la Academia daba su discurso

Desata polémica actuación de Sofía Vergara en la entrega de los Emmys

Literalmente la trataron de mujer-objeto, destacó una revista Jezebel

El acto fue calificado de sexista por otros medios

La ex modelo dijo a periodistas que la broma significaba que alguien puede ser guapo y al mismo tiempo divertido y reírse de sí mismo

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Adam Levine y Behati Prinsloo en el salón verde del teatro Nokia, donde se efectuó la 66 entrega de los galardonesFoto Ap
 
Periódico La Jornada
Miércoles 27 de agosto de 2014, p. 9

Los Ángeles, 26 de agosto.

La resaca de los premios Emmy fue particularmente fuerte el martes para la colombiana Sofía Vergara: su exhibición en una plataforma que giró 360º para que el público apreciara su curvilínea figura desde todos los ángulos fue objeto de indignación y acusaciones de sexismo.

La estrella de Modern Family por primera vez no estuvo postulada a mejor actriz de reparto por su papel de Gloria, pero de todos modos dio de qué hablar cuando acudió al escenario y se subió a una plataforma giratoria mientras Bruce Rosenblun, presidente de la Academia de las Artes y Televisión, daba un discurso.

Las palabras del ejecutivo apenas si fueron escuchadas por el espectadores, atentos a la despampanante figura de la ex modelo, envuelta en un ceñido vestido de Roberto Cavalli de corte sirena, blanco con detalles plateados y de generoso escote.

Garantizamos nuestro éxito cautivando siempre al espectador, bromeó Rosenblun, mientras la actriz balanceaba las caderas en el momento en que éstas apuntaban al público.

La escena parecía fuera de lugar en tiempos en que las mujeres han conseguido brillar con luz propia con papeles de personas inteligentes y complejas –fenómeno antes poco visto en la televisión–, como es el caso de Kerry Washington (Scandal), Julianna Margulies (The Good Wife), Robin Wright (House of Cards) o incluso Julia Louis-Dreyfus (Veep) en el lado de la comedia.

De hecho, Margulies se refirió a este respetuoso cambio en el papel de sus congéneres cuando recibió su premio a mejor actriz dramática: ¡Qué tiempos más maravillosos para las mujeres en la televisión!, exclamó.

Por eso el chiste de Vergara, que habría pasado desapercibido en un programa de variedades de una década atrás, fue considerado de tan mal gusto.

¡Puah!, escribió el martes Sarah Larson en la prestigiosa revista cultural The New Yorker. En su artículo, la crítica de televisión acusó la 66 ceremonia de entrega de los premios Emmy en Los Ángeles de repulsiva y de haber estado dominada por hombres blancos.

Un giro preocupante, escribió el diario en línea Huffington Post. Literalmente, la trataron como mujer-objeto, indicó por su lado la revista Jezebel. Ese extraño momento de los Emmys en que Sofía Vergara se volvió objeto, tituló la revista estadunidense Salon, denunciando el aún omnipresente sexismo.

Lluvia de críticas en Twitter

En Twitter también llovían críticas de los espectadores, que señalaban el episodio como la gota que derramó el vaso o una utilización alucinante de Sofía Vergara.

En el otro espectro del universo sexista, el humorista político Stephen Colbert justo acababa de agradecer su premio a mejor programa de variedades disculpándose con el público por tener una sola mujer en su equipo de autores.

En la noche de los premios, en la sala de prensa del teatro Nokia, Vergara dijo a periodistas que tales acusaciones eran ridículas y que la broma, en lugar de ser sexista, significaba que alguien puede ser guapo y al mismo tiempo divertido y reírse de sí mismo.

Modern Family igualó la noche del lunes el récord de Frasier al ganar en la categoría de mejor comedia cinco veces consecutivas.

La serie –responsable de elevar a Vergara al estrellato de Hollywood y por tanto a convertirse en noticia por sus criticados pedestales giratorios– ganó tres Emmys en total: mejor comedia, mejor actor de reparto para televisión y Burrell y mejor director para Gail Mancuso.

Gracias a su brillante papel de un padre de familia muy ñoño que trata desesperadamente de ser cool, Burrell ya había recibido este premio en 2011.

El programa sobre una familia muy siglo XXI venció sobre The Big Bang Theory, Louie, Orange Is The New Black, Silicon Valley y Veep.