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La compañía de danza presentó Nosotros en el festival de artes escénicas alternativas

Moving Borders reafirma al barrio, espacio de lucha contra la soledad

En la colonia los chavos gastan todo su ser y les importa eso que para los demás parece trivial

Cuatro bailarines dan vida a héroes y amigos, pero también a miradas cómplices o retadoras

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El trabajo de Moving Borders está marcado por la mezcla de danza contemporánea y folclóricaFoto Demián Chávez
Enviado
Periódico La Jornada
Jueves 14 de agosto de 2014, p. 8

Querétaro, Qro., 13 de agosto.

La coreografía Nosotros, de la compañía de danza Moving Borders (Arte sin Fronteras), de San Luis Potosí, encuentra a cuatro cuerpos motivados por la música, desde un rap o hip hop, hasta una norteña o cumbia, para luchar contra la soledad, reafirmarse como grupo, como jóvenes en el barrio o en la calle, con luz o sin luz, para bailar en la penumbra.

Nosotros puede ser cualquier chavo mexicano que en su espacio, su colonia, gasta todo su ser, compite y todo le es importante, eso que a los demás les parece trivial.

México, como el resto del mundo, ancla a sus jóvenes a un espacio vital. Sin trabajo y sin estudios, los muchachos valoran la fuerza del otro, su destreza en el baile, sus netas, sus juegos en serio, sin tiempo para ser patético.

En el barrio el silbido avisa, llama, concita. Se convoca a los cuates y a la novia; es el código. Un grupo se define por sus silbidos y si hay pleito es una llamada de guerra, un ¡sal, que es urgente! Somos los sin nombre y los números de las estadísticas, somos los ninis y los desempleados, la cédula cuarta hasta la muerte, el boleto del Metro, la última moneda.

Búsqueda de héroes y amigos

En Nosotros, cuatro jóvenes se echan una mano, un codo, un pie, la pierna, una mirada cómplice o retadora. ¿Qué traes? Veamos de qué estás hecho. En el baile se va formando el carácter y la identidad. Somos en grupo, un universo. Somos nosotros y así somos. Somos el presente eterno, la máscara de luchador, lo clandestino, la búsqueda de héroes y de amigos. Somos nosotros, los mismos de siempre.

El trabajo de danza contemporánea Nosotros se presentó el lunes pasado en el teatro Rosalío Solano, personaje creativo del cine nacional y orgullo de los queretanos. El Festival Internacional Siguiente Escena de Artes Escénicas Alternativas abrió su baraja en las cuatro sedes que son con entrada gratuita.

Nosotros es un trabajo de Moving Borders, bajo la dirección de Jaciel Neri; es una obra que deja claro que nadie está solo y tiene sus iguales. Con la pieza coreográfica Jaciel Neri obtuvo el primer lugar del Premio INBA-UAM, Concurso de Creación Coreográfica Contemporánea 2010-2011, en su edición 31 y fue estrenada en el Palacio de Bellas Artes en México. La obra se ha presentado en festivales de Alemania, Costa Rica, Italia, España, República Checa, Polonia y México.

Moving Borders es una productora mexicana de danza contemporánea que inició en 2007. Se presentó por primera vez en el International Internet Dance Festival SideBySide-Net, en Alemania, donde ganó el primer lugar con la obra Life Steps (2008). Desde entonces ha producido obras en colaboración con artistas de Alemania, Colombia, República Checa y México. Ha viajado a festivales nacionales e internacionales.

Moving Borders se perfila como empresa cultural, trabajando en coproducciones internacionales, actividades pedagó- gicas y organización de actividades como iN Muestra de Arte Escénico 2013.

El trabajo coreográfico de Neri está marcado por la mezcla de lenguajes entre lo contemporáneo y lo folclórico. Para mayor información.

Me Llamo Sebastián

El músico Me Llamo Sebastián es uno de los encargados de llenar de música calles, plazas y callejones de Querétaro durante el festival, que concluirá el próximo domingo.

En entrevista, Sebastián dijo que ante tanta pregunta de quién es él optó por ponerse Me Llamo Sebastián.

Es originario de Santiago, Chile, y comentó que en el país del sur están surgiendo muchos grupos de música nuevos. “Estamos relativamente cerca de Brasil, pero su música no nos llega tanto porque la barrera del idioma es muy fuerte. De Argentina, bueno, no hay competencia porque nos llevamos bien y con Internet nos estamos comunicando y sabemos qué estamos haciendo. Con este proyecto nosotros comenzamos en 2009 y lo que me interesa es hacer música política. Toco piano y canto y así me presentaré en este festival.

En mis letras hablo de lo que pasa en mi país o de lo que estoy viviendo. Nací en 1977 y soy de la generación posdictadura. Es muy importante no olvidar el pasado y hacerse cargo de él. Yo trato de no evitar el tema y me interesa generar una opinión política. Hay quienes se niegan a hablar de política, pero eso ya es una postura política. Si creen en eso está bien y tampoco los voy a criticar. Cada quien su búsqueda.

Tiene a la fecha tres discos grabados; Salvador, de 2010; Adiós, vesícula mía, de 2011, y Hambre, de 2013. “Siemprre tenemos hambre de algo. Entiendo el hambre como la voluntad de querer algo y puede ser por un vacío, pero también por algo común a todos. Les recomiendo el tema Niño rosado, que habla del hecho de haber nacido gay en un país tradicional, conservador, y de cómo se cierra al tema de la homosexualidad. Laura es una canción sobre una niña prostituta. Varita mágica refiere cómo el imaginario Disney nos lavó los cerebros cuando éramos chicos y hoy estamos frustrados. Este disco va bien, tanto que por él me han traído acá.”

Se presentará este jueves y viernes en el festival.