Lerma, Méx., Más de mil 200 pobladores de San Lorenzo Huitzizilapan, comunidad de la zona boscosa de este municipio, impidieron hoy una asamblea en la que representantes de bienes comunales pretendían autorizar el cambio de uso de suelo –de común a asentamiento urbano– en poco más de 3 mil hectáreas ubicadas en la periferia del bosque otomí-mexica, declarado área natural protegida hace más de 60 años. Los pobladores acusaron a las autoridades estatales y municipales de alentar el despojo de tierras para dar paso a la construcción de viviendas y centros comerciales a un costado de la nueva autopista Naucalpan-Toluca, a la cual también se oponen. Más de 600 granaderos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana resguardaron el comisariado de bienes comunales, pues la sesión se ha cancelado en cinco ocasiones. La presencia de los uniformados suscitó un connato de enfrentamiento con mujeres inconformes, quienes después de ser empujadas y golpeadas fueron apoyadas por unos 500 hombres. Los policías recibieron la orden de retirarse. Los pobladores resguardaron el comisariado de bienes comunales para impedir la asamblea y acordaron ir este lunes al palacio municipal para exigir al alcalde que deje de alentar el despojo de tierras. De ahí partirán a Toluca para demandar al gobernador Eruviel Ávila dar marcha atrás al proyecto de la autopista y al fraccionamiento de tierras.