Kiev, 29 de junio.

Cientos de integrantes de las unidades de combate voluntarias de Ucrania exigieron hoy al presidente Petro Poroshenko que acabe con el alto el fuego en las provincias separatistas del este del país, que decrete la ley marcial y que lance una ofensiva contra los terroristas, al tiempo que el ejército gubernamental y los militantes pro rusos se enfrentaban por segundo día consecutivo en Slaviansk.

Los actos de guerra ocurrieron durante la tregua de 10 días decretada por Poroshenko para tratar de negociar un acuerdo de pacificación del oriente de Ucrania, donde las provincias de Donietsk y Lugansk se declararon independientes de Kiev, en mayo.

La tregua, originalmente prevista del 20 al 27 de junio, fue prolongada hasta este lunes a las cinco de la tarde de Kiev (nueve de la mañana de la ciudad de México) para tratar de dar tiempo a una más amplia negociación diplomática, en la que participan directamente los presidente Vladimir Putin de Rusia, François Hollande de Francia, Angela Merkel de Alemania y Poroshenko, quienes hoy sostuvieron un diálogo de dos horas vía telefónica.

Un día después de que cinco soldados ucranios murieron en tiroteos con los independentistas en Slaviansk, una localidad sitiada desde mayo por la tropa oficial, la Guardia Nacional aseguró que nuevamente los pro rusos de esa región atacaron un puesto de control con fuego de mortero y de tanques. Pese a la aparente intensidad de las hostilidades, no hubo reporte de bajas de parte de la fuerza gubernamental.

Los combatientes de la autoproclamada República Popular de Donietsk –donde se encuentra Slaviansk– responsabilizaron a los soldados de Kiev de haber iniciado el combate con proyectiles que impactaron un mercado y un edificio de departamentos, dejando varios civiles heridos.

Aunque los choques del sábado y el domingo han sido los más fuertes desde que Poroshenko decretó la tregua, a lo largo de la semana hubo varias acusaciones recíprocas de violación al cese el fuego en una región donde los líderes armados rechazan el acercamiento a la Unión Europea y el consiguiente alejamiento de Rusia, un histórico aliado.

Poroshenko propuso mayor autonomía a la región oriental, pero a cambio pide el desarme incondicional de los independentistas. Las negociaciones con Putin, Merkel y Hollande continuarán este lunes.