Guadalajara, Jal., 29 de junio.

Los mariachis callaron y la fiesta preparada en la glorieta de la Minerva para la celebración del esperado, pero fallido triunfo de la selección mexicana de futbol, debió cancelarse.

A las 2 de la tarde empleados de la Secretaría de Movilidad reabrieron a la circulación el importante cruce, sede popular de los festejos tapatíos, sobre todo para celebrar los triunfos de sus equipos de futbol.

Esta vez no fue así y el operativo con policías y agentes viales estuvo de más. Apenas unas decenas de fanáticos que coreaban gritos de puto contra el árbitro del encuentro en el cual México fue eliminado por Holanda, se dieron cita en el lugar y se retiraron pronto.

En plaza Guadalajara, frente a la catedral metropolitana, donde por lo menos 2 mil personas se reunieron para ver el partido en las pantallas instaladas por el ayuntamiento capitalino, cientos de personas lloraron por la eliminación.

Otra vez nos quedamos en la orilla, no puede ser, se quejaban muchos en el nuevo coro lastimero. Otros: No fue penal, el árbitro nos eliminó. El coro popular se consoló de nuevo gritando putooo.

Saldo blanco

Los niños fueron los más conmovidos por la eliminación y no tuvieron empacho en manifestar su tristeza. Las autoridades reportaron saldo blanco en las concentraciones que hubo en plazas de municipios conurbados como Zapopan, Tonalá y Tlaquepaque.