Espectáculos
Ver día anteriorJueves 27 de marzo de 2014Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Al sol y al sereno se presenta el viernes en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris

No existen conciencia y valoración sobre quienes hacen y preservan el son jarocho

Muchos de ellos mueren en el abandono y el anonimato, dice la antropóloga Rubí Oseguera

Periódico La Jornada
Jueves 27 de marzo de 2014, p. 9

Dar cuenta de la vigencia y fortaleza del son jarocho es el propósito de la propuesta escénica multidisciplinaria Al sol y al sereno, que se presentará el próximo viernes 28 de marzo en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris.

Música, canto, poesía y zapateado se conjugan en este mosaico pluricultural en el que la riqueza creativa de los pueblos del sotavento veracruzano queda expuesta por quienes se encargan de hacerla y recrearla en sus propias comunidades.

Son 18 artistas en escena, gran parte de ellos portadores directos de la tradición, que se reúnen sobre el escenario para dar vida a un fandango, esa fiesta popular en la que el ingenio, la alegría y la vida son celebrados.

La idea y dirección de esta iniciativa se debe a la antropóloga y bailarina veracruzana Rubí Oseguera, quien durante 18 años emprendió una investigación entre las comunidades fandangueras del sur de esa entidad acerca de las particularidades de esas expresiones tradicionales.

Al sol y al sereno, explica la investigadora y artista, está muy lejos de lo banal, de ser un espectáculo de danza folclórica y grupos musicales de son. Es un espacio escénico para la tradición, para revelarla y reconocer a quienes la hacen posible.

Y es que, a su decir, el son jarocho cuenta con amplia proyección hacia al exterior de las comunidades donde se hace, pero, en lo que respecta al interior de las mismas, no existen una consciencia y valoración de las personas que la preservan, la hacen posible y la transmiten.

Por ignorancia y poco conocimiento, no apreciamos el valor cultural que tenemos, como es el caso de músicos, cantantes, jaraneros, bailarinas, todos esos portadores directos de la tradición. Muchos de ellos se están muriendo en el abandono y el anonimato, dijo en conferencia de prensa.

Expresión viva

Entre los aspectos que se evidencian en este proyecto cultural-artístico, destaca cómo el fandango es una expresión multigeneracional, al reunir en torno suyo a los viejos que dictan las pautas y a los jóvenes que son un puente entre la tradición y lo contemporáneo.

La del son jarocho es una expresión viva y, como tal, abierta a elementos contemporáneos, porque ninguna tradición puede ser algo estático ni muerto, subrayó la antropóloga.

En ese sentido, destacó la inclusión de repertorio de reciente creación, instrumentos de otros géneros y nuevos elementos y medios técnicos y tecnológicos en el son jarocho, así como el diálogo de éste con otras disciplinas.

Tal es el caso del referido montaje, en el que se incorporan recursos multimedia, como el cine, merced el trabajo de un colectivo del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC).

Otro de los aspectos relevantes de esta propuesta escénica es que en ella se da testimonio de la importancia de las mujeres en el fandango, al ser las que llevamos la llama de la fiesta, como es el caso de las bailadoras, que se encargan de marcar el ritmo, empujar y decir qué pieza sigue.

Con un repertorio integrado por piezas musicales del dominio popular, como La bamba, El siquisirí y El pájaro Cu, así como otras de reciente creación, entre los músicos participantes se encuentra Liche Oseguera, Julio Morales, Darmacio Cobos y Jorge Corté.

Todos ellos son exponentes del son jarocho contemporáneo, los cuales entrelazarán su quehacer con la palabra de los poetas y el misticismo de los bailadores tradicionales de fandango con más de 70 años de edad.

Al sol y al sereno se presentará en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris (Donceles 36, Centro Histórico), el próximo 28 de marzo, a las 20:30 horas.