La Iglesia católica asentó que por ‘‘una alarmante descomposición gubernamental y pública’’, Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, se empoderó e incluso su “influencia llegó a las portadas de revistas internacionales de negocios’’.

En el editorial del semanario Desde la Fe, la Arquidiócesis Primada de México apuntó que el ‘‘poder’’ de El Chapo Guzmán es “consecuencia del vacío de gobierno y la complicidad de funcionarios, quienes no cumplieron con su trabajo, favorecieron la impunidad por cañonazos de billetes, privilegios y obscenas fortunas patrimoniales’’.

Sostuvo que desde que el capo sinaloense se fugó, se constataron las redes de corrupción tejidas por él, quien ‘‘jamás desapareció y su paradero era conocido en las comunidades’’. Su detención y exhibición llenó de ‘‘loas a los responsables de la seguridad pública y se mandó el mensaje: logramos lo que otros no pudieron’’.

Pero la ‘‘marcha a favor del delincuente’’ debe preocupar a las autoridades y sociedad por la ‘‘narcocultura y la mitificación del capo, por la corrupción de autoridades que protegen y encubren a los cárteles”’’

Finalmente, la jerarquía católica reiteró su rechazo a la iniciativa de legisladores del PRD de legalizar el consumo de la mariguana.