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Red Light Secrets abrió sus puertas en el corazón del Barrio Rojo

Un museo revela la realidad tras las célebres ventanas de Amsterdam
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El museo de la prostitución, localizado entre dos burdeles, presenta la visión de las trabajadoras del sexo, lo que significa estar detrás de las ventanas y las miradas que recibenFoto Ap
 
Periódico La Jornada
Viernes 7 de febrero de 2014, p. a11

Amsterdam, 6 de febrero.

Un nuevo museo abrió este jueves en el Barrio Rojo de Amsterdam, destinado a mostrar la realidad del mundo de la prostitución, y llevando a los turistas detrás de las célebres ventanas.

“Siempre me pregunté lo que realmente sucedía detrás de las ventanas del barrio, la forma en que ellas viven su vida, cómo es su mundo”, explicó Melcher de Wind, uno de los creadores del nuevo museo situado entre dos burdeles, en el corazón del Barrio Rojo.

Este establecimiento, llamado Red Light Secrets, museo de la prostitución, quiere diferenciarse de otros museos del sector, como el museo del sexo y el museo del erotismo.

“Los otros museos de los alrededores se concentran en el sexo o el desempeño sexual. Este presenta una visión de las trabajadoras del sexo, lo que significa estar detrás de una ventana, las miradas que reciben”, explica Yolanda van Doeveren, quien trabaja sobre la prostitución en el municipio de Amsterdam.

Quizás ahora los turistas tendrán una posibilidad de cambiar su comportamiento y mostrarán más respeto, explicó, destacando que la comuna no participó financieramente en el proyecto.

Aproximadamente 7 mil personas trabajan en la prostitución en Amsterdam, y 75 por ciento de ellas provienen de países de bajos ingresos, sobre todo de Europa del Este, según la municipalidad. La prostitución fue legalizada en Holanda en 2000.

En las 409 ventanas que tiene la ciudad, las mujeres pagan un alquiler en torno a 150 euros diarios. Trabajan 11 horas diarias, seis días por semana. La visita de un cliente dura un promedio de 10 minutos.