Tras admitir que su primer año al frente del Gobierno del Distrito Federal fue duro y difícil, Miguel Ángel Mancera Espinosa advirtió que no existe derecho humano que se sustente en la violencia, por lo que no se puede permitir que ésta destruya lo que hemos construido con paciencia y reflexión, en referencia a la manifestaciones en la ciudad de México.

Yo no vengo aquí a ver por mi futuro, yo tengo que trabajar por el futuro de ustedes, de la ciudad, de nuestros hijos, dijo el titular del Ejecutivo local en un discurso pronunciado en el Auditorio Nacional, y en el que sentenció: Yo no protesté la encomienda que se me dio por esta ciudad para administrar una imagen, la acepté para gobernar y lo voy a seguir haciendo con responsabilidad.

Ante integrantes del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal, vecinos de todas las delegaciones, funcionarios e invitados especiales, como el rector de la UNAM, José Narro Robles, hizo un resumen de las acciones realizadas durante este año en materia social, medio ambiente, movilidad y económica.

Agregó que la capital del país se encamina a un nuevo modelo de organización dentro del Pacto Federal; ya dejamos atrás la minoría de edad y hoy estamos pidiendo el reconocimiento de esa madurez, manifestó en alusión a la reforma política del Distrito Federal.

Mancera, quien antes de emitir su mensaje se comunicó con la familia de Andrés Manuel López Obrador para conocer su estado de salud, luego del infarto sufrido por el ex candidato presidencial, dijo que su gobierno continuará escuchando a la gente y trabajará para ella; “vamos a pagar el justo precio que tiene la confianza que me han depositado.

Esta es una capital de libertades y de tolerancia, equitativa y de derechos plenos, competitiva e igualitaria en oportunidades y bienestar para todos, en la que, destacó, estamos trabajando como un solo gobierno con las delegaciones, sin colores, sin politiquería.

El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, dio ayer un mensaje con motivo de su primer año al frente de la administración localFoto Marco Peláez

La mayor parte de su discurso fue para enumerar las acciones realizadas por su administración en este primer año, que ha sido difícil, pero de resultados también, en el que se ha establecido la ruta de gobierno responsable, fiel a los principios y convicciones progresistas, que combina el valor de la libertad con el de la justicia social.

Insistió en que para el próximo año se consolidará el proyecto Capital Social como parte toral de su gobierno, con el propósito de reducir las brechas de desigualdad, garantizando, por ejemplo, el derecho a la alimentación, para lo cual se pondrá en marcha el programa Aliméntate, con el que se pretende beneficiar a 160 mil personas en situación de pobreza extrema y carencia de alimentos.

Se trata, dijo, de combatir el analfabetismo –cuya meta en este sexenio es reducirlo 50 por ciento–, entregar uniformes y útiles escolares, y continuar programas como SaludArte, que otorga comidas y clases extraescolares a más de 30 mil niños en las zonas que más lo necesitan; así como dar atención integral a niños hasta de seis años, con servicios de salud, educación y desarrollo social, de manera gratuita.

Ciudad abierta

Cuando leía su discurso, Jorge López Munguía, de la Asamblea contra el Alza al Metro, desde el fondo del Auditorio Nacional gritó: La consulta del Metro es una farsa, que se consulte a la ciudadanía. Sólo se pidió la opinión a 7 mil 200 personas, lo que hizo que reporteros y personal de seguridad se arremolinaran a su alrededor.

Mancera guardó silencio, dirigió la mirada hacia López y dijo: Esta es una ciudad en donde todo mundo puede ser escuchado. Te escuchamos con atención, tienes derecho a manifestarte, muchas gracias, ahora déjanos continuar, pidió, y continuó con su mensaje.