En mayo próximo los obispos de Michoacán expondrán al papa Francisco la situación de violencia que se vive en esa entidad, durante la visita ad limina apostolorum de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) que realizará a Roma del 12 al 31 de mayo de 2014, señaló el obispo de Zamora, Javier Navarro Rodríguez, quien descartó que sacerdotes y obispos de ese estado estén amenazados y el crimen organizado cobre cuotas a la Iglesia católica en esa zona.

Navarro Rodríguez, quien también es vicepresidente de la CEM, detalló que aunque el pontífice está enterado de la situación en la entidad, sí le vamos a exponer lo que sentimos, lo que percibimos y lo que estamos haciendo para evangelizar en este contexto de violencia. Admitió que coincide con lo dicho el pasado 15 de octubre por el obispo de Apatzingán, Miguel Patiño, de que Michoacán tiene todas las características de un Estado fallido.

El obispo Patiño dice que percibe en el pueblo la sensación de un Estado fallido. Yo percibo en cierto sector lo mismo, comentó.

También dio a conocer que, ante el problema de la violencia, los obispos de la región enviaron el 18 de mayo pasado al ex gobernador interino de Michoacán, Jesús Reyna, una carta, en la cual le expresaron la preocupación de la Iglesia católica. Aclaró que no se han acercado al gobernador Fausto Vallejo, y comentó que la forma de evangelizar en un contexto de violencia debe poner énfasis en el perdón y la corrección.

“La lectura del evangelio de San Lucas nos dice cómo evangelizar en tiempos de violencia: ‘Si tu hermano te ofende siete veces, perdónalo, pero corrígelo’. Como pastores, hay que corregir a quienes se equivocan, y se equivoca el que no respeta la vida de los demás como un valor fundamental, pero también hay que perdonarlo. Los obispos no dejamos de predicar el evangelio de la libertad, y el que se dedica al trasiego, elaboración o consumo (de droga) está siendo menos libre, provocando esclavitudes en los demás.”

Antes, en conferencia de prensa con motivo del comienzo de la 96 asamblea plenaria de la CEM, el cardenal José Francisco Robles Ortega, presidente del organismo, manifestó: Consideramos que no hay una acción que apunte al sector eclesiástico como objetivos del crimen organizado, y calificó de aisladas las agresiones contra los religiosos.