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El gobernador Duarte y otros funcionarios pretenden abrir al cultivo 6 mil hectáreas, aseguran

Miles de agricultores constituyen frente en Chihuahua contra presa

Reducirá el caudal que llega a las presas La Boquilla y Las Vírgenes; afectará a miles de familias

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Agricultores del movimiento No a la presa La Boca repartieron calcomanías en el municipio de Delicias, Chihuahua, para informar que el embalse proyectado en la cuenca del río Conchos –segundo de la entidad en importancia–, disminuirá el caudal que llega a las presas La Boquilla y Las VírgenesFoto Miroslava Breach
Corresponsal
Periódico La Jornada
Domingo 29 de septiembre de 2013, p. 24

Ciudad Delicias, Chih., 28 de septiembre.

Miles de agricultores de los municipios de Rosales, Julimes, Delicias, Meoqui, San Francisco de Conchos y Saucillo constituyeron un movimiento para oponerse a la construcción de la presa La Boca en el municipio de Balleza, tierra del gobernador César Duarte Jáquez, para irrigar 6 mil nuevas hectáreas de cultivos en esa región.

Los productores alegan que el embalse, proyectado por el gobierno del estado, retendría los escurrimientos de la cuenca del río Conchos por más de 70 millones de metros cúbicos de agua que deben llegar a las presas La Boquilla y Las Vírgenes –de las que depende el sustento de la agricultura y la economía de la región– las cuales ya tienen déficit y no pueden soportar otra retención.

Rogelio Ortiz, gerente de la Sociedad de Responsabilidad Limitada Unidad Conchos y Unidad San Pedro, que agrupa a 14 mil usuarios de agua de riego agrícola de los distritos 5, 113 y Labores Viejas de San Francisco de Conchos, explicó: No se puede plantear el desarrollo de una región a costa de otra. Todos los estudios técnicos sostienen que la cuenca del río Conchos, afluente del Bravo, es deficitaria; el agua que se pretende retener faltaría en esta zona.

Las necesidades de agua en los distritos son de mil 250 millones de metros cúbicos, más las pérdidas por evaporación y filtración llegarían a mil 400 millones de metros cúbicos anuales para un solo cultivo. En los pasados 111 años, sólo cuatro de cada 10 años hemos tenido precipitaciones suficiente para abastecer nuestras necesidades, señalaron los agricultores en un documento que entregaron a las autoridades.

Argumentaron que de los escurrimientos de los afluentes de la cuenca del Bravo existen volúmenes comprometidos en el Tratado de Aguas y Límites Internacionales, por lo que se afecta también a agricultores de Tamaulipas y del sur de Texas, tanto que la Comisión Internacional de Aguas y Límites ya requirió información sobre la presa La Boca.

Los productores habían anunciado una movilización para este sábado, pero pactaron una tregua con el secretario general de Gobierno, Raymundo Romero Maldonado, la víspera de una gira de trabajo que realizaría el gobernador por Ciudad Delicias.

Los tractores que iban a llevar a los actos presididos por el mandatario se quedaron en sus sitios, pero continuaron pegando engomados en los vehículos con la leyenda No a la presa La Boca.

El compás de espera abarca hasta el próximo jueves cuando se instalará la mesa de diálogo que revise los aspectos técnicos de la construcción del embalse.

Durante una gira por el sur del estado, efectuada hoy, César Duarte aceptó que no se ha cancelado el embalse, a diferencia de lo dicho el viernes por su secretario de Gobierno, Romero Maldonado, quien durante un primer encuentro efectuado en Delicias explicó que el gobierno del estado no podría iniciar ningún trámite de construcción hasta que la Comisión Nacional del Agua emita un dictamen de factibilidad y otros estudios técnicos.

El gobernador explicó: Ayer hubo un acuerdo entre productores y no se ha concretado técnicamente, se ha comprometido una mesa de diálogo.

Duarte explicó que la presa La Boca no reduciría los caudales que llegan a La Boquilla y Las Vírgenes: Las concesio- nes son lo primero que vamos a garantizar, pero no debemos seguir aceptando que en Sinaloa, 2 mil millones de metros cúbicos de agua se vayan al mar y se impida hacer infraestructura en Chihuahua; es un crimen que los habitantes de las cuencas hídricas de Chihuahua sólo vean pasar el agua y la riqueza de sus manos.

Los productores han denunciado el interés de abrir al cultivo más de 6 mil hectáreas de tierras de agostadero presuntamente adquiridas en los años recientes en la zona por funcionarios estatales oriundos de Balleza y cercanos al gobernador.

“En Balleza tienen tierras Javier Garfio, alcalde electo de Chihuahua; Raúl Javalera, presidente de la Junta Central de Aguas, y el gobernador César Duarte; esas ya las tenían, pero hay tierras nuevas que han comprado en el valle: aparece hasta un importante ganadero y empacador del ramo de los embutidos.

A nosotros no nos interesan los que ya están, sino los que quieren estar, señaló Bernardo Antillón, presidente de los unidad de riego, módulo 5 del distrito 5 de Delicias.